Sergey Kotov podemos decir que es una persona afortunada. Iba conduciendo su motocicleta a 140 millas por hora (unos 225 Km/h) cuando tuvo un grave accidente por despistarse mirando a un compañero que iba a su lado. Gracias a la GoPro que llevaba en su casco podemos vivir este suceso en primera persona, dando como resultado una experiencia que quita el aliento, informa alt1040.com, en su portal.



Al parecer, Kotov ha conseguido recuperarse completamente. De todos modos, tras el accidente estuvo en coma luchando por su vida, algo que es totalmente comprensible después de ver el choque que tuvo a esa velocidad tan elevada.