¿Si esto no es corrupción qué nombre le ponemos?
Santo Domingo. Una auditoría realizada a la Superintendencia de Seguros por parte de la Cámara de Cuentas , durante el año electoral del 2008 y presentada hoy por el periódico Diario Libre revela que se incurrió en diversas anomalías que involucraron la suma de RD$111,784,023.11.
Según refleja el experticio practicado al período del primero de enero al 31 de diciembre del 2008, y cuyo informe final fue aprobado el 20 de marzo del 2014, se incurrió en desviaciones contables en las ayudas sociales, contribuciones y donaciones, se entregaron obras grado a grado, y se hicieron pagos excesivos en construcciones, seguros y fianzas para obras.
Sobre las ayudas, en el peritaje se comprobó que la entidad desembolsó irregularmente RD$65,046,419.37 a personas físicas, instituciones sin fines de lucro, donaciones para terminación de obras y a instituciones descentralizadas del Gobierno, cuya práctica la Cámara de Cuentas entiende debe ser descontinuada por no ser afines a la Superintendencia de Seguros.
Asimismo, que las obras de ingeniería ejecutadas por la institución entre escuela, destacamento policial, clínica rural, ascendentes a RD$33,252.029.93 fueron otorgadas grado a grado a un mismo contratista.
También se determinó que hubo excesos de pagos en esas construcciones por un total de RD$10,036,832.07, en las que se comprobó que existen diferencias y duplicidad en partidas saldadas con relación a los trabajos ejecutados. Los pagos realizados a los contratistas por concepto de seguros y fianzas para tales obras, por un monto de RD$3,338,141.74 tampoco fueron justificados.
De igual modo, se estableció que algunas obras fueron contratadas sin haberse acordado formalidades, en las que se hizo adiciones por encima del 25% del monto original. Se citaron los casos del edificio de la entidad, cuya remodelación fue contratada por un monto de RD$5,450,681.09, y tuvo un adicional de un 102.61% por valor de RD$5,592,931.29, así como la reparación y terminación de la planta de tratamiento de aguas residuales del club de la Superintendencia, acordada a un costo de RD$3,915,988.11, y hubo que complementar ese presupuesto con RD$1,900,273.87 (48.52%). La reacción de la institución fue que se cometió un error en no adicionar los contratos de las obras, pero que se tomaron las medidas pertinentes.
Sobre las ayudas sociales, se detectó que en los meses de marzo y abril del 2008, se emitieron 6 cheques a nombre de diferentes personas y cantidades que envuelven un monto de RD$110,600.00 , los cuales fueron endosados y canjeados para uso personal del director financiero Francisco Aponte Pons. A esa situación, la Superintendencia dijo que canceló el funcionario, y le retuvo el 50% de sus prestaciones laborales.
La auditoría también determinó que 50 personas fueron incluidas en nómina sin prestar servicio en la entidad, cobrando entre RD$7,245.00 y RD$78,000.00, para un gasto mensual de RD$953,799.21.
Hija Euclides, supervisora de compras en la entidad
En la auditoría se estableció que la hija del superintendente de Seguros, Adria Ninoska Gutiérrez, labora como supervisora de compras de la entidad, con un salario mensual de RD$45,000, y un incentivo adicional de RD$3,250, devengando ingresos durante el año auditado por RD$579,000. Ingresó a la Superintendencia el 18 de agosto del 2004.
El nombramiento fue justificado por la entidad aludiendo que se produjo antes de la Ley 41-08, que prohíbe a cónyuges y a personas con lazos de consanguinidad prestar servicios en la misma institución.
También se comprobó que ingresos propios no son depositados a la cuenta de la Tesorería Nacional.