Por Elisabeth ZINGG
PARÍS. La epidemia del sobrepeso y de la obesidad, que durante mucho tiempo era un mal exclusivo de los ricos, afecta a 2.100 millones de personas, cerca del 30% de la población mundial, de las que más de la mitad están en países en desarrollo, alerta un estudio publicado este jueves.
«La obesidad es un problema que afecta a todo el mundo, independientemente de la edad o los ingresos o del país», dice el doctor Christopher Murray, director del Instituto de Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington que ha realizado este análisis de los datos disponibles en 188 países.
Entre 1980 y 2013, el porcentaje de personas con un índice de masa corporal (IMC) superior al 25 -el umbral del sobrepeso- ha pasado a nivel mundial del 28,8% al 36,9% en el caso de los hombres y del 29,8% al 38% en el de las mujeres, según un estudio publicado en la revista médica británica The Lancet.
El IMC es la relación entre el tamaño y el peso, un índice superior a 30 está considerado como una señal de obesidad en el adulto. En el caso de que el índice se sitúe entre el 25 y el 30, se considera sobrepeso.
Pero el fenómeno no afecta a todos los países de la misma forma: Estados Unidos, Gran Bretaña y Australia aparecen en lo alto de la lista de los países desarrollados, donde la obesidad o el sobrepeso afecta a más del 60% de las personas mayores de 20 años.
En el caso de los países en desarrollo, América Latina, Oceanía y Oriente Medio ya han superado a los occidentales.
Es el caso de Egipto, Libia, Arabia Saudita, Omán, Bahréin y Kuwait, donde el sobrepeso y la obesidad han aumentado considerablemente, afectando a más del 70% de la mujeres mayores de 20 años.
Lo mismo ocurre en varios países de América Latina, como México, El Salvador, Costa Rica, Honduras, Chile o Paraguay, y sobre todo en los microestados del Pacífico (islas Tonga, Kiribati o Samoa) donde la tasa supera el 80% tanto entre hombres como en mujeres mayores de 20 años.
– Aumenta la obesidad infantil –
No solo hay más personas con sobrepeso, sino que cada vez empiezan a tenerlo antes: entre 1980 y 2013, el número de niños o adolescentes obesos o con sobrepeso en el mundo aumentó un 50%.
Actualmente afecta al 22% de las niñas y al 24% de los niños en los países desarrollados y en torno al 13% de los niños de ambos sexos en los países en desarrollo, con un aumento particularmente importante en Oriente Próximo y África del Norte, aunque solo en el caso de las niñas.
«Este aumento es muy preocupante […] en la medida en que la obesidad infantil puede tener graves consecuencias para la salud, sobre todo en las enfermedades cardiovasculares, diabetes y numerosos cánceres», dice Marie Ng, la investigadora que coordina el estudio.
Según un estudio publicado en 2012 en The Lancet sobre la la «carga mundial de la morbilidad» («global burden of disease»), el sobrepeso y la obesidad habrían provocado 3,4 millones de muertes solo en 2010.
Con 160 millones de personas afectadas, Estados Unidos es el país con mayor número de obesos y con sobrepeso del mundo, por delante de China, India, Rusia, Brasil y México.
El problema en Estados Unidos afecta a un poco más del 70% de los hombres y a cerca del 62% de las mujeres mayores de 20 años, así como al 30% de los menores y adolescentes.
En cuanto a los obesos propiamente dichos, representan el 32% de los hombres adultos y el 34% de las mujeres adultas en Estados Unidos, contra el 4% de los adultos chinos o indios.
Y aunque el crecimiento de la obesidad se ha desacelerado ligeramente desde 2006 en los países desarrollados, después del boom de los años 1980 y 1990, los datos son preocupantes.
«En las últimas tres décadas, ningún país ha logrado reducir su tasa de obesidad y prevemos que aumente regularmente en los países con ingresos bajos o medios, salvo si se adoptan medidas urgentes para frenar esta crisis de salud pública», dijo el doctor Murray.