Muchas mujeres eligen cosméticos porque sus nombres suenan a algo natural. Pero… ¿qué contienen realmente? Así como «no todo lo que brilla es oro», no todo lo que se dice natural lo es. Conoce químicos peligrosos que aún utiliza la industria y cómo detectarlos.
Desde el 2005 y hasta el 2011, la venta de cosméticos y productos de cuidado personal “naturales” en EE.UU. creció un 78%. Y en parte las mujeres hispanas han impulsado ese crecimiento: en un panel del evento CEW’s Women & Men in Beauty Series, realizado en el 2012 en Nueva York, se presentaron análisis que mostraron que las latinas han aportado un 37% al crecimiento global del mercado de la belleza. Y ese número puede crecer ya que, según datos de la Oficina del Censo, las latinas de entre 18 y 49 años, representarán a 1 de cada 5 mujeres para el 2020.
Las compañías grandes están uniéndose a la tendencia al ofrecer nuevos productos, actualizar algunos viejos y adquirir compañías de cosméticos naturales más pequeñas. Burt’s Bees ahora es parte de Clorox, Tom’s of Maine fue absorbida por Colgate-Palmolive y The Body Shop se ha convertido en una unidad de L’Oréal.
Aunque los fabricantes se están enfocando en consumidores que buscan cosméticos más saludables, el problema es que muchos lo están haciendo cambiando lo que está en el empaque, pero no lo que hay dentro. Sí, podrían haber agregado aloe o manteca de karité, pero podrían también contener muchas cosas que no quieres frotar sobre tu cuerpo cada día.
Para comparar, en Europa hay 1,370 químicos prohibidos en los cosméticos, mientras que en Estados Unidos son sólo 11.
La industria de cosméticos en el país, valuada en $70 mil millones, en gran parte, es auto regulada. Bajo la Ley de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos de 1938, los cosméticos no necesitan ser revisados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) antes de ser vendidos. En lugar de esto, el panel de Revisión de Ingredientes de Cosméticos supervisa la seguridad de los mismos y hasta ahora, ha revisado menos de 3,500 de los más de 12,500 ingredientes que se usan.
A la FDA no sólo le falta el poder de revisar la seguridad de los productos sino que ni siquiera puede requerir una revelación completa de ingredientes o exigir la retirada de productos del mercado.
Pero, además, los problemas de salud por lo general son el resultado de una exposición crónica a largo plazo. Algunas preocupaciones serias, como daños al sistema reproductivo o cáncer, causados por químicos podrían no ser aparentes durante 20 años o más, así que la conexión puede ser pasada por alto fácilmente.
Mientras los oficiales de la FDA se deciden a hacer algo al respecto, la siguiente es una guía que te ayudará a decidir mejor, para verte bella sin poner en riesgo tu salud.
Fuente holadoctor.com