Llega de manera rápida y fuerte: dolor muscular y de cabeza, fiebre, cansancio. La gripe puede noquearte durante semanas aún siendo un adulto joven y saludable. Para los niños, ancianos y personas con un sistema inmunológico débil, los riesgos de complicaciones, como la neumonía, son mucho más altos. La mejor manera de protegerse es vacunarse pronto.
Vacunarse es esencial
La vacuna de este año es la misma que la del año pasado, pero necesitas ponerte una nueva esta temporada. Si la recibes ahora, debería protegerte hasta abril, cuando el virus desaparece. La vacuna previene la enfermedad hasta un 80% del tiempo en los adultos menores de 60 años y alrededor del 50% en los mayores de 65. Si te enfermas pero estás vacunado, por lo general padecerás un forma más leve de la enfermedad.
1. Considera la nueva vacuna «cuadrivalente»
La vacuna estándar, llamada trivalente, protege contra tres de las cepas de gripe más comunes del año pasado: dos de los virus de la influenza A (H1N1 y H3N2) y uno del virus de influenza B. La versión cuadrivalente que se comenzó a usar en el 2013, protege contra esos virus más otro, de influenza B. Las cepas B son las más activas al final de la temporada de gripe, en febrero y marzo.
2. ¿Sirve la vacuna de dosis alta?
Esta vacuna, llamada Fluzone de dosis alta, tiene cuatro veces la dosis de antígeno contra la gripe que la vacuna estándar. Un estudio respaldado por los fabricantes, publicado en la edición del 14 de agosto de New England Journal of Medicine, determinó que era un poco más eficaz que la vacuna estándar para prevenir la gripe en personas mayores de 65 años.
3. Vacuna en aerosol nasal
Esta vacuna, llamada FluMist, protege a los niños de 2 a 8 años mejor que la vacuna regular, según indican los CDC en la nueva recomendación para esta temporada. La desventaja: es posible que el niño necesite de una segunda dosis después de un mes.
4. Cuándo tomar antivirales
Si estás en alto riesgo no esperes para tomar antivirales. Los medicamentos oseltamivir (Tamiflu) y zanamivir (Relenza) pueden aliviar los síntomas de la gripe, reducir las complicaciones y disminuir la posibilidad de propagar la enfermedad si los tomas dentro de las 48 horas después de enfermar. Sin embargo, un estudio de los CDC conocido en julio determinó que sólo uno de cada 5 pacientes de alto riesgo recibió alguno de estos medicamentos.
5. No a los antibióticos para la gripe
Estos medicamentos sólo funcionan contra las bacterias y la gripe la causa un virus. Sin embargo, el estudio de los CDC reveló que los médicos le dieron antibióticos al 30% de las personas con gripe. “Y es probablemente una estimación baja”, dice Havers, «el estudio se limitó a tres antibióticos”. Usarlos cuando no los necesitas puede hacer que sean menos eficaces cuando sean necesarios y aumentar el riesgo de infecciones.
Fuente Holadoctor.com