Tener una relación de novios permite a la pareja conocerse mejor y ver qué cualidades le gusta o no de la otra persona. Si se trata de una relación seria que pudiera terminar en matrimonio o convivencia, es aún más importante que ambas partes pongan de su parte para que impere el respeto y la confianza.
La doctora Monsita Nazario Lugo, consejera profesional, señala que, en general, la violencia puede darse indistintamente contra el hombre o la mujer y es producto de la poca tolerancia en la sociedad. En lo que a relación de pareja respecta, la experta advierte que deben estar atentos a las señales de violencia desde el noviazgo, momento en el que es necesario sentarse y conversar sobre lo que cada uno desea en el futuro.
“Siempre he recomendado la terapia de pareja antes de conocerse en la que los novios pueden conocer muchos aspectos. Hay parejas que después de terapia han decidido no casarse, es mejor tomar la decisión ates de que haya hijos y otras responsabilidades que hacen el camino más difícil”, asegura Nazario Lugo.
La experta aconseja estar alerta a las señales de violencia durante el noviazgo para poder buscar la ayuda necesaria, ya sea para modificar conductas y seguir la relación o para terminarla.
Nazario Lugo destaca que al primer indicio de actitudes violentas hay que tomar acción. Puede que estas conductas parezcan cotidianas, pero en realidad son muy dañinas. “El primer indicio es un grito, una tirada de puerta y eso aunque todos lo hagan, no es normal ni correcto. Eso denota, a simple vista, que no hay respeto ni autocontrol y en cualquier momento eso sigue escalando hasta que el empujón se convierte en un golpe”, añade la consejera.
La conducta que no se corrige se repite cada vez más y de forma más severa. La experta enfatiza que es bien importante que la gente no vea esos exabruptos entre pareja como algo normal. “Le pasará a todo el mundo pero no es lo correcto”, asegura.
Por Liz Sandra Santiago / liz.santiago@gfrmedia.com