París, Francia. El alcalde de un suburbio de París se negó a que se enterrara a un bebé gitano de origen esteeuropeo en su municipio, donde vive la familia del lactante fallecido en un campamento, indicaron el sábado fuentes coincidentes.

Muerte



Según una asociación local de solidaridad con los gitanos de Europa Central y Oriental, el alcalde de Champlan «usó como pretexto» el hecho de que la muerte del bebé «fue declarada» en el municipio vecino de Corbeil-Essonnes.

«Se trata de racismo, de xenofobia», precisó el presidente de esta asociación, Loic Gandais.



La bebé, llamada Maria Francesca, nacida el 14 de octubre, sufrió la «muerte súbita del lactante» en la noche del 25 de diciembre, explicó Gandais.

Su fallecimiento se constató en el hospital de Corbeil-Essonnes, tras lo cual, a pedido de la familia, una empresa de pompas fúnebres pidió a la alcaldía de Champlan permiso para enterrarla en el cementerio de esta última comuna.

El alcalde de Champlan, Christian Leclerc, se negó a ello sin brindar «ninguna explicación», declaró a la AFP el gerente de la empresa Julien Guenzi, calificando este tipo de respuesta de «muy poco común».

La bebé será enterrada el lunes en otro municipio cercano, el de Wissous.

En la mañana del sábado, la AFP no logró obtener declaraciones del alcalde de Champlan.