La anemia es una enfermedad que afecta a cerca del 25% de la población . Puede presentarse a cualquier edad, pero sobre en niños de edad preescolar y no embarazadas. Una medida para combatirlo es consumir ricos en hierro.

Es una afección que surge por la carencia de glóbulos rojos, encargados de llevar oxígeno a todo el . Tener anemia puede hacer que te sientas cansada y débil”, señalan especialistas de Mayo Clinic.



Otras señales de alerta podrían ser piel pálida, palpitaciones irregulares, dificultad para respirar, dolor de pecho o cabeza, mareo. Incluso manos y pies fríos.

Esta enfermedad puede ser leve y puede darse por diversas causas. Se recomienda llevar una dieta saludable y rica en hierro, ácido fólico, vitamina B12 que puedes obtener de alimentos recomendados en la Guía de Práctica Clínica de la Secretaría de Salud.



Si tratas a tiempo esta enfermedad vas a recuperar tu energía, mejorar la calidad de vida, pero sobre todo, a no dejar que avance y surjan complicaciones.

Sopa de lentejas. Una taza de lentejas aporta 3.59 mg gramos de hierro. Estas te van a ayudar a aumentar la producción de glóbulos rojos en la sangre. Incluye un plato en tus comidas, por lo menos dos o tres veces a la semana.

Carne magra. Para enriquecer tu alimentación, combina en tus platillos carne roja magra o pescado (aportan vitamina B2) con un alimento vegetal rico en hierro como espinacas, frijoles o brócoli, recomienda las nutriólogas María Garriga y Cecilia Montagna.

Huevo. Es rica fuente de ácido fólico, necesario para la producción de nuevas células. Lo ideal es consumir únicamente la clara, que concentra 88% de agua y 11% de proteínas, dos o tres veces por semana.

Ensalada de garbanzos. Para agilizar la recuperación, la Fundación Española del Corazón recomienda una ensalada de garbanzos, jitomate, pimiento y naranja. Puedes consumirla todos los días.

Arroz blanco fortificado. Una taza de arroz blanco o integral aporta 1.97 mg gramos de hierro. Evita el refinado, ya que podría provocar carencia de vitaminas y minerales. Puedes comerlo solamente hervido o en agua agregándole unas gotas o cáscara de limón.

Postre de frutas cítricas. Los cítricos aportan una importante cantidad de vitamina C, necesario para la absorción de hierro. Combina naranja, mandarina, kiwi y fresa frescas. Disfruta el postre tres o cuatro veces por semana, sugiere la Fundación Española del Corazón.

Nueces. Permiten estabilizar los niveles de hierro. Tan solo 100 gramos aportan 15 mg de este mineral. Incluye como colación unas 5 nueces durante una semana. Evita abusar porque contienen altas calorías.

Jugo de betabel. Este jugo es un gran depurador de la sangre y te va a aportar hierro. Licua 125 ml de jugo de betabel, 125 mil de jugo de zanahoria con hojas de espinaca y media manzana. Bebe únicamente un vaso al día por una semana.

Jugo de naranja. La Fundación Española del Corazón sugiere añadir al jugo de naranja suplementos de hierro. La vitamina C facilita la absorción de hierro. Es recomendable antes del desayuno o comidas cuando el estómago está vacío.

Miel. Una medida sencilla es endulzar tus bebidas (por ejemplo, agua de limón o naranja) con un poco de miel, pues ayuda a aumentar la producción de hemoglobina, así llegará más oxígeno a tus órganos. Si sufres diabetes no se recomienda.

Fuente: Salud 180