El científico ruso Vasily Bogoyavlensky ha pedido una investigación «urgente» sobre los denominados «agujeros del fin del mundo» de la península siberiana de Yamal (Rusia), después de que las imágenes aéreas captadas durante los últimos meses hayan permitido descubrir la existencia de una docena de nuevas simas similares a la localizada el verano de 2014 a unos 30 km de la localidad de Bovanenkovo.
La petición de nuevas investigaciones sobre este fenómeno ha sido difundida a través del diario The Siberian Times.
Vasily Bogoyavlensky, subdirector del Instituto de Investigación de Petróleo y Gas de Moscú, ha indicado que hasta ahora se conocía la existencia de tres cráteres principales, pero el análisis de recientes imágenes aéreas y la información facilitada por ganaderos locales han permitido ampliar la cifra.
«Ahora sabemos de siete cráteres en el área ártica. Cinco están directamente en la peníncula de Yamal, uno en el distrito autónomo de Yamal y uno en el norte de la región de Krasnoyarsk, en la peníncula de Taymir», indicó Vasily Bogoyavlensky a The Siberian Times. El experto aseguró que hasta ahora se sabe la locación exacta de cuatro de los nuevos agujeros más grandes. Además, afirmó Bogoyavlensky, «estoy seguro de que hay más cráteres en Yamal, sólo tenemos que buscarlos».
Nuevos agujeros cerca de la fosa inicial
Uno de los descubrimientos más interesantes es un cráter bautizado como «B2» (el del año pasado fue nombrado «B1»), que ahora es un lago rodeado por más de 20 cráteres más pequeños. «Estudiando las imágenes satelitales encontramos que inicialmente no había cráteres ni un lago en este lugar. Algunos cráteres aparecieron y después otros más. Después, supongo, se llenaron con agua y se convirtieron en varios lagos que se mezclaron luego en un sólo lago, con un tamaño de 50 por 100 metros» indicó Bogoyavlensky.
Otro punto interesante de B2 es que está ubicado a 10 kilómetros del campo de gas Bovanenkovo, desarrollado por Gazprom. Por ahora la principal tésis para explicar estas formaciones es una explosión de gas generada por el derretimiento del permafrost, debido al aumento de la temperatura (por ello, científicos han hablado del fenómeno como uno que comprueba el cambio climático).
El derretimiento del hielo subterráneo genera un aumento en la presión, por lo que el gas sale en la forma de estos cráteres. «No podemos descartar que estas emisiones de gas en el Ártico se puedan prender en algunos casos», dijo el experto, en relación a comentarios de residentes de la penísula de Yamal que afirman haber visto un flash de luz.
«Es importante no asustar a la gente pero también lo es entender que es un problema muy serio y que debemos investigarlo», aseguró Bgoyavlensky, sobre la preparación de futuros estudios en la zona.
Fuente: lavanguardia.com