Lucir un envidiable bronceado no es cosa fácil…
Hasta las chicas más precavidas pueden quemarse con el sol. Tal vez olvidaste reaplicarte el protector solar cada dos horas, o te quedaste dormida en la arena y se te pasaron las horas. Pero cualquiera que sea la razón, terminar con una quemadura en vez de un bronceado es una clara señal de que tienes que reforzar tus armas para la próxima sesión bajo el sol.
Pero si ya el daño está hecho, los dermatólogos expertos recomiendan tomar un triple enfoque para minimizar la hinchazon, el enrojecimiento y los daños a largo plazo, y te contamos en detalle a continuación.
La primera prioridad: “tómate una aspirina, o cualquier otro anti-inflamatorio que tengas a tu alcance, tan pronto como sea posible. Esto te quitará el calor que tienes en el cuerpo, y aliviará las molestias de la quemadura”, sugiere la dermatóloga Lisa Airan. Luego, aplícate compresas frías empapadas de leche entera, “La grasa y la proteína de la leche calmarán la irritación”, dice la vicepresidente de la Fundación contra el cancer de piel, Elizabeth K. Hale.
Segundo paso: una vez que la piel se ha enfriado un poco, hay que hidratar la zona afectada, obsesivamente. “Es cierto que una piel elástica se recupera más rápido de un trauma” comenta Hale, quien añade que las cremas con antioxidantes, como las vitaminas C y E, son especialmente beneficiosos aliados post-solares. “La luz ultravioleta provoca mutaciones en la piel que pueden provocar cáncer de piel y envejecimiento prematuro, pero los antioxidantes contrarrestan parte de este daño inducido por UV”.
Otra opción muy aconsejada por los que más saben de la dermis es el té verde y la sábila. El té calma la inflamación de la piel mientras que el aloe vera (sábila), tiene un poder curativo, pero como puede causar picazón, lo mejor es mezclarlo con Vitamina E, que es una crema hidratante y promueve el sanamiento de la quemadura. Y si prefieres algo más sofisticado, puedes conseguirlo en gel, y meterlo en la nevera para un efecto más refrescante.
Después de una semana de sol, el agua es fundamental, y si sobre expusiste tu cuerpo, aún más. ¡Hidrátate! el líquido es esencial para reponer los líquidos perdidos por el sol. ¿No te gusta el agua? entonces prueba con el té helado descafeínado con menta para un extra de antioxidantes.
Si tus quemaduras son más fuertes y tienes un poco de dinero extra una última alternativa son los tratamientos de LED, que utilizan una tecnología de onda suave para ayudar a disminuir las células inflamatorias, pero te costará mucho más que un gel de aloe vera o un té verde.
Fuente E