Opinión de Raúl Amiama
Como padres el verdadero reto con nuestros vástagos, es ofrecerle una crianza basada en buenas costumbres, educación, responsabilidad, honestidad y un sin número de valores, que no concluiríamos en este espacio detallándolos. ¿Pero lo estamos haciendo Bien?, algunos lectores pudieran responder afirmándolo rotundamente, otros quizás “titubeando” pensarían que sí, un grupo sería responsable y se contestaría que No, y los restantes le invadiría en todo su ser un infeliz sentimiento de vergüenza. Si observamos los acontecimientos que están golpeando a nuestra sociedad Dominicana, lamentablemente desde el punto de vista estadístico, el veredicto a la pregunta inicial, es NO.
Para resolver un problema definitivamente, tenemos que atacar la Causa Raíz, y es donde entran en juego los hijos, aquellos que van creciendo, desarrollándose y adoptando comportamientos que serán practicados en la sociedad y/o en el entorno en que conviven. Extrayendo el caso específico de los feminicidios, para desvelar un poco el origen de este fenómeno, puedo observar que desde el hogar se le celebra al “varón” que tenga “noviecitas” (en plural) en la escuela o colegio, a la “hembra”… bueno…Ni Pensarlo!, otro punto es que a la niña de la casa se le adiestra en los quehaceres o los denominados “oficios”, al niño No, Jamás!. Sólo coloco estos dos ejemplos (que existen muchos) para mostrar que la forma incorrecta de enseñanza hacia los hijos inicia con una actitud que los padres la entienden como normal, dígase se encuentran en la versión 1.0 de “Crianza Básica” y no ha sido actualizada. Por eso hoy en día se notan hombres machistas, con deseos de seguir destacando su género de forma equivocada, versus mujeres que quieren imponerse para liberarse de la prisión cultural en que viven.
No Existe un Programa de Educación Familiar…
Ahora que se está tejiendo el Pacto contra la delincuencia, debe ventilarse crear un programa de Educación Familiar y diseñar asignaturas con el mismo rigor que las comunes en las distintas etapas de la enseñanza inicial, básica y media. El contenido de las mismas debe estar orientado con métodos e instructivos que busquen de la manera más eficiente cómo establecer en niños y adolescentes la conducta ideal en Hijos, Padres, Esposos y Trabajadores, que son su roles del presente y del futuro, mostrarle el peligro de saltar hacía el oscuro mundo del crimen y las drogas, y fortalecerle los valores espirituales.
Dado que la descomposición social arropa de manera alarmante a las familias, recordando el caso reciente del pelotero involucrado en el caso del Viceministro de Energía y su hijo, urge que el estado intervenga en esa dirección, los resultados de una decisión tan drástica como la que señalo, tendrá sus frutos como mínimo en dos décadas. Como medida interina, es mandatorio radicalizar la lucha contra los delincuentes y endurecer de manera histórica las sanciones penales… mientras tanto “Criemos bien” y démosle seguimiento a nuestros hijos, “Pa´ver si nos salvamos”.