El cadáver del periodista Blas Olivo fue encontrado ayer con cuatro impactos de balas, dos en el tórax y dos en el abdomen.
El cuerpo sin vida fue hallado en una finca ubicada en el kilómetro 64 de la Autopista Duarte, pasado el mediodía.
Según parientes de Olivo, el comunicador salió de una actividad familiar en Bonao para cumplir un compromiso que tenía en Santo Domingo con la promesa de retornar a buscar a sus familiares y no regresó.
Dalin Olivo, hermana del profesional asesinado, confirmó al periódico Listín Diario que el vehículo del periodista fue encontrado en las proximidades de Bonao con un choque ligero y las llaves puestas, pero señaló que no saben si su pariente fue víctima de un robo, porque la Policía acordonó el área donde fue encontrada la jeepeta y no han recibido información al respecto.
La tragedia se ha convertido en un misterio, ya que a Olivo lo conocían como alguien trabajador y sin ningún tipo de enemistad con nadie.
Se desempeñaba como encargado de prensa de la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), además fue un economista y destacado editor de periódicos como El Nuevo Diario, realizando diversas publicaciones especializadas en los medios, así como en sus labores de asesoría y extensión a favor de los productores. Era considerado un eficaz colaborador de los medios tanto en la JAD como en los temas agropecuarios en sentido general.
