Unos 15.000 manifestantes formaron el domingo en Tokio una cadena humana para protestar contra el proyecto de construir una nueva base militar norteamericana en el archipiélago de Okinawa.

Japoneses



Los manifestantes rodearon el parlamento con pancartas contrarias al proyecto que prevé trasladar la base aérea norteamericana de Futenma a Henoko, en el noreste del archipiélago.

Situada en la ciudad de Ginowan, la base de Futenma debe ser desplazada hacia una región litoral menos poblada, pero los habitantes de Okinawa no quieren ninguna base en su territorio.



«Debemos impedir esa construcción», declaró un manifestante de 66 años, Akemi Kitajima.

Okinawa, un archipiélago ocupado por Estados Unidos al terminar la Segunda Guerra Mundial y devuelto a Japón en 1972, alberga más de la mitad de los 47.000 soldados norteamericanos presentes en territorio nipón.

Los habitantes están descontentos con la presencia de soldados norteamericanos debido al ruido de los aviones y a los riesgos de accidentes.

Además aducen que la presencia de los soldados constituye una puerta abierta a la criminalidad, basándose en varios casos de violación registrados en los últimos años.

El 29 de abril pasado, en Washington, el primer ministro conservador Shinzo Abe confirmó que va a trasladar la base de Futenma en función del pacto de defensa nipo-norteamericano.

«Es la única solución», dijo Abe tras reunirse con el presidente norteamericano Barack Obama.