El ministro de Energía y Minas, Antonio Isa Conde, favoreció ayer el aprovechamiento de las riquezas mineras del país, siempre que se haga de una manera que beneficie al desarrollo y protegiendo más el agua que el oro.

Planteó que República Dominicana debe evitar que a consecuencia de la actividad minera se vayan creando más pasivos ambientales y pidió trabajar para que prácticas del pasado no se repitan.



Antonio Isa Conde

“Eso se lo debemos a las próximas generaciones. Somos una isla con un ecosistema frágil y debemos tomar en cuenta que prácticas que pueden ser buenas en cualquier país del continente, no siempre son buenas para República Dominicana”, advirtió el funcionario, entrevistado en el Almuerzo Semanal que realiza Multimedios del Caribe.



Isa Conde habló con soltura del tema y aprovechó el escenario para tocar otros tópicos, como las discusiones que se realizan para la firma del Pacto Eléctrico.

“Esta generación lo que tiene es que manejar bien los recursos. No podemos dejarle a las nuevas generaciones los hoyos y todos los problemas que les hemos traído como consecuencia de una explotación indiscriminada”, apuntó.

Y dejó claro que lo correcto es tratar de que el pasivo ambiental que se creó en el pasado se vaya pagando para que se remedien los terrenos. Desde su punto de vista, se requiere trabajar en las normas y los protocolos para poder fiscalizar que las actividades ligadas a la minería cumplan con las mejores prácticas internacionales.

Isa Conde sostuvo que si bien en el país hay que proteger más las aguas que el oro, eso no significa que se dejen de explotar las riquezas que existen. “Lo que tenemos es que hacerlo de manera adecuada, no a costa de cosas que pueden -a la larga- hacer tal daño al país, que los beneficios que pudiéramos obtener de manera inmediata con esa explotación se conviertan en carga para las generaciones futuras. Lo que tenemos que hacer es que esas riquezas las saquemos de la manera más eficiente y prudente posible para que puedan servir de base al desarrollo sostenible de la nación”, expuso.

Informó que en el país, de acuerdo a un registro minero elaborado, se han identificado casi 5,000 personas que trabajan como mineros en la pequeña minería. Esos pequeños mineros están agrupados en unas 29 asociaciones. A la fecha, las cifras del Ministerio de Energía y Minas (MEN) indican que hay registrados de manera global unos 1,374 pequeños mineros en Santiago, Barahona, Monte Plata, Hato Mayor y San Cristóbal. En detalle, en Santiago son 414, en Barahona 290, en Monte Plata 01, en Hato Mayor 506 y en San Cristóbal 164.

Luego de “soltar” esos números, Isa Conde planteó que en República Dominicana se requiere crear una masa crítica de gente que influya en lo que sería un clúster del sector minero, en el que, necesariamente, se incorpore a la gente que está con el día a día de eso. Es decir, a los mineros, artesanos y comerciantes, entre otros. A Isa Conde la designación como ministro de Energía y Minas, el 29 de abril de este año, lo tomó por sorpresa y muy “quita’o de bulla”, según rememoró ayer. No se esperaba el cargo. Sin embargo, eso no ha evitado que hable con bastante propiedad sobre la agenda que tiene en sus hombros.

“Aunque me cogió de sorpresa, desde el primer momento que llegué les dije a los que me rodeaban que no será difícil que se den cuenta de lo que voy a hacer, porque todo el que me conoce sabe que soy una persona con una visión determinada y cercana a la Estrategia Nacional de Desarrollo y al plan del gobierno del presidente Danilo Medina”, indicó.

Aseguró que su visión de lo que debe ser la República Dominicana del futuro está contenida en la Estrategia Nacional. Y de ahí precisamente surge la explicación de por qué se integró a trabajar con tanta pasión en la campaña del entonces candidato Danilo Medina (Partido de la Liberación Dominicana).

“Danilo desde antes de ser candidato comenzó a trabajar en un proyecto de país y de gobierno y por eso trabajé con pasión en su campaña”, dijo Isa Conde, observado atentamente por Víctor Bautista y Patricia Mora, sus acompañantes a la entrevista. Bautista es director de Comunicaciones del MEM, y Patricia Mora la directora de Relaciones Públicas y Comunicaciones Internas. Por parte de elCaribe participaron en el encuentro Héctor Linares (subdirector y encargado de la sección Dinero), Héctor Marte, jefe de Redacción de Apertura, y Sandra Guzmán, editora de elCaribe digital.

Las palabras de Isa Conde sobre la visión del actual mandatario sirvieron de preámbulo para vincular esa visión general de Medina con el concepto particular sobre la pequeña minería.

“Si ustedes leen la Estrategia Nacional de Desarrollo y leen el programa de gobierno del Presidente, ese es uno de los comunes denominadores. Ahí se habla de la pequeña minería, que tiene una trascendencia tremenda”, indica el ministro.

Sin embargo, sostiene que ese sector hay que comenzar a organizarlo, como parte de un programa integral que le corresponde no solo al Ministerio de Energía y Minas, sino también a una serie de instituciones públicas para poder retomar el tema y llevar eso a las magnitudes que se necesitan.

Aseguró que en la pequeña minería hay problemas de medio ambiente graves y que si eso no se trabaja con normas y métodos afecta, precisamente, al medio ambiente, aunque no tanto como la gran minería.

“Si los de la pequeña minería no se organizan pueden hacer mucho daño a la larga. Pero lo peor es la propia condición de vida de la gente que hace la actividad. El que conoce cómo se extrae el larimar sabe del peligro que corren y la cantidad de muertes que a veces ocurren en esas explotaciones mineras y su relación con los dueños de las tierras que a veces se creen dueños de la mina”, advierte Isa Conde en la conversación.

“Los índices de reducción de pobreza que tenemos obedecen básicamente a cómo se ha enfrentado la pobreza rural, que es la antesala de la pobreza urbana”, dijo. Sostuvo que en la cadena productiva a veces el que procesa el material no dispone de él porque no cuenta con la tecnología para transformarlo o se tiene que quedar solo con los pedazos que puede procesar y lo otro se va al extranjero.

“Luego, muchas veces, nos devuelven eso convertido en joyas o en otra cosa”, apuntó.

Desde su óptica, ese eslabón de la cadena tiene que ser protegido, cuidado y desarrollado porque en él hay empleos, oportunidades y riquezas.

Tendré problemas, pero aguantamos lo que venga

Una de las condiciones para fomentar la actividad minera es que acabe de salir la Ley de Ordenamiento Territorial, que se discute, incluso, a nivel de las comunidades y las distintas organizaciones, según Isa Conde. Aseguró que en esa normativa están trabajando varios ministerios.

“Ahí nos van a decir qué es lo que tiene nuestro país. En una zona puede haber mucho oro o lo que sea, pero nosotros tenemos que ver cuál es el precio que vamos a pagar para extraerlo y eso no podemos decirlo de olfato o porque un funcionario quiera”, advirtió el ministro en la extensa conversación.
Sostuvo que lo que debe definirse, principalmente, es el costo-beneficio para este país. De otro lado, dijo que sería una estupidez tener recursos naturales y no explotarlos de manera sostenible. “Yo sé que voy a tener problemas, pero para eso es que estamos. Para poder aguantar lo que venga con tal de defender esa concepción de cómo deben funcionar las cosas”, indicó.

Aseguró que en cualquier parte del mundo existe el denominado “capitalismo salvaje” y que hay capitalismo minero salvaje. Dijo que a eso se refirió el presidente Medina en una oportunidad. “A ese capitalismo minero salvaje tenemos que ponerle coto, pero también hay otro grupo que tiene mucho prejuicio, muchas veces fundamentado en lo que ha sido el pasado y eso hay que entenderlo también. “Cualquier minería tiene que tener licencia social, que es la convicción de la comunidad de que esa actividad se está haciendo con responsabilidad. Isa Conde dijo en tono franco que es probable que se equivoque muchas veces, pero siempre haciendo algo para no quedarse de brazos cruzados.

Existen 127 concesiones de explotación minera

Cuando Héctor Linares le pregunta a Isa Conde cómo hacer que la minería, que tiende a chocar con el medio ambiente, se convierta en un instrumento de desarrollo y de mejoramiento de las condiciones de la gente, la respuesta fue: “Lo que tenemos es que trabajar juntos”.

En la actualidad 127 concesiones mineras de explotación están vigentes. De esas, dos son de minería metálica y 125 son para minería no metálica. De éstas, dos se rigen con contratos especiales con el Estado y el resto con contratos de adhesión. Existen 41 solicitudes de concesión de explotación en trámites en la Dirección de Minería. En exploración hay otorgadas 21 concesiones mineras y 126 solicitudes en proceso. Desde el inicio de gobierno de Danilo Medina se han rechazado 211 solicitudes de concesión de exploración y se ha reducido el área de derechos mineros de 1,604,872 hectáreas en el 2012 a solo 716,241 hectáreas.