Es común encontrarlas en las carteras, mochilas o cajas de zapatos nuevos, pero no todos saben para qué sirven o qué hacer con ellas.
Hablamos de aquellas pequeñas bolsas de pelotitas, cuya utilidad intuimos pero no tenemos tan clara, por lo que muchas veces las botamos al basurero o las guardamos pensando que es lo mejor.
Según señala un artículo del diario electrónico Huffington Post, estas bolitas que parecen de gelatina están hechas de gel de sílice, “una forma de dióxido de silicio” comentan.
Stavros Georgakarakos, encargado de comunicación y marketing de la cadena de moda española Uterqüe, señala que este diminuto accesorio – también llamado bolsa desecante- “sirve para eliminar la humedad del producto cuando se encuentra almacenado”.
Respecto a si deben dejarse donde vienen, Georgakarakos explica que no es necesario, pues se usan principalmente para evitar la humedad de los artículos mientras están en bodega, o son transportados.
Con esto coincide, Elena García Silva, diseñadora de la empresas de carteras española LAUTEM, quien indica que la compañía para la cual trabaja las pone en los bolsos “sobre todo por una cuestión de transporte y almacenaje. Nunca sabes exactamente cómo van a viajar y cómo van a estar almacenados en aduanas”.
Estas pelotitas permiten que los productos no se dañen con la humedad y en el caso de los zapatos que no pierdan la forma. “Una vez que llega al usuario final, lo mejor es preocuparse de conservar el producto en un lugar que no sea demasiado húmedo; la bolsita no la conservaría en el bolso porque se puede romper”, dice García Silva.
¿Qué puedes hacer con las bolsas de gel de sílice?
En Huffington Post explican que estas bolitas, que durante la Segunda Guerra Mundial se usaron para mantener seca la penicilina, pueden tener otros usos.
Por ejemplo, se pueden poner en joyeros para asegurarse que los accesorios de plata no se pongan negros con la humedad.
También sirven para que las fotos no se deterioren con el paso del tiempo, para que el bolso del gimnasio no adquiera mal olor o los cubiertos no se oxiden ni se oscurezcan.
Incluso, según el artículo, sirven para retirar la humedad de los teléfonos móviles, cuando se han mojado.
Y por último, son útiles en las ventanas de viviendas y automóviles porque disminuyen la condensación.
Fuente: BioBioChile