Aunque la Segunda Guerra Mundial terminó hace 70 años, a día de hoy las consecuencias de la misma siguen estando presentes. Recientemente una mujer de 91 años fue acusada por una fiscalía de Alemania de estar implicada en 260 asesinatos en el campo de exterminio de Auschwitz. Cientos de guardianas del régimen nazi no son tan recordadas como sus camaradas masculinos, pero algunas de ellas fueron mucho más crueles.
El terror nazi no era anónimo. Detrás de los asesinatos se escondían nombres propios, y entre esos miles de nombres había muchísimos femeninos. El periódico ruso AIF recientemente publicó la lista de mujeres más sangrientas del régimen nazi, que fueron el brazo ejecutor de los peores crímenes que ha cometido la humanidad.
Irma Grese, ‘El ángel de Auschwitz’
Irma Grese fue una supervisora de prisioneros en los campos de concentración de Auschwitz, Bergen-Belsen y Ravensbrück durante la Segunda Guerra Mundial. A los 19 años ya se encontraba como supervisora en el campo de concentración de Ravensbrück.
En 1943 Grese fue transferida a Auschwitz, donde tenía a su cargo a 30.000 prisioneras judías y donde fue apodada por las presas ‘La bestia bella’ y ‘El ángel de la muerte’, a causa de su comportamiento sádico y perverso. Irma Grese asesinó con látigos a cientos de personas, torturó a niños, cometió abusos sexuales y dejó que perros se lanzaran encima de las prisioneras para devorarlas.
En 1945, la mujer de 22 años, que fue una de las principales criminales de guerra, fue condenada a la horca en el Juicio de Bergen-Belsen.
Ilse Koch, ‘La bruja de Buchenwald’
Ilse Koch (también se la conoce con el apodo de ‘La bruja de Buchenwald’) era esposa de Karl Koch, coronel de las Schutzstaffel alemanas (SS) y comandante del campo de concentración de Buchenwald, lugar del que fue una de las supervisoras. Entre otras atrocidades, Koch seleccionaba prisioneros con tatuajes para ser asesinados y coleccionaba lámparas, guantes, bolsos y cubiertas de libros hechas con la piel de los ejecutados.
En 1967, Ilse Koch, condenada a prisión perpetua, se suicidó en la cárcel.
María Mandel, ‘La Bestia’
María Mandel que pasó a la historia como ‘La bestia de Auschwitz’, fue guardiana de las SS con alto rango en ese campo de exterminio, donde durante dos años se encargó de seleccionar prisioneros para las cámaras de gas. Mandel, responsable de 500.000 asesinatos, también seleccionaba a los niños que iban a ser ejecutados y se divertía escogiendo a algunos prisioneros que le servían como mascotas para posteriormente enviarlos a la muerte tras cansarse de ellos.
María era aficionada a la música. Fue ella quien creó la orquesta de Auschwitz ?compuesta por presos? que acompañaba las ejecuciones, selecciones y transportes.
En 1947 Mendel fue sentenciada a muerte por crímenes contra la humanidad. Fue ahorcada en 1948, a los 36 años de edad.
Hermine Ryan-Braunsteiner, ‘La Yegua’
Hermine Ryan-Braunsteiner, que se ocupaba de la selección de las víctimas a exterminar en la cámara de gas en el campo de concentración de Majdanek, era apodada ‘La Yegua’, porque asesinaba a los prisioneros dándoles patadas con botas reforzadas con hierro.
En 1973 el gobierno alemán, acusando a Hermine Ryan-Braunsteiner de tener responsabilidad compartida en la muerte de 200.000 personas, solicitó su extradición de EE.UU. donde la asesina que evitó el castigo vivía con su marido. En 1981 Ryan-Braunsteiner fue condenada a cadena perpetua, pero cuatro años más tarde la mujer fue excarcelada debido a complicaciones relacionadas con la diabetes que le costaron la amputación de una pierna.