Cotuí. Suplidores de alimentos para los desayunos y almuerzos de las escuelas públicas denunciaron que el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie), les adeuda dos meses y medio de los productos suministrados para tales fines.

Desayuno escolar



Los distribuidores, quienes pidieron que sus nombres no sean publicados por temor a que les retiren sus contratos, sostuvieron que están al borde de la quiebra y que sus suplidores ya no les quieren fiar un peso más.

Más de cien proveedores distribuyen los alimentos a centros educativos de los niveles inicial, básico y medio de esta provincia, quienes no han recibido el pago de los meses de agosto, septiembre y lo que va de octubre del corriente año.



Uno de tres suplidores consultados por el periódico  Diario Libre indicó que desde Inabie le deben 800 mil pesos, otro dijo que le adeudan un millón y un millón 200 mil al tercero de ellos.

Las deudas que tiene el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil con distintos proveedores puede provocar la quiebra de muchos de ellos, ya que la mayor parte de los casos se trata de empresas pequeñas, que no tienen un capital que pueda mantener el suministro por tanto tiempo sin recibir el pago de sus servicios.

“De no recibir el pago no creo que pueda seguir ofreciendo el servicio”, refirió uno de los denunciantes.

Comentaron que desde hace un mes se vienen reuniendo con funcionarios de la referida institución, pero solo reciben promesas.

Aseguraron que la misma suerte corren suplidores de otras regiones del país, quienes, al igual que ellos, temen que desde Inabie tomen represalias en su contra si denuncian la situación.