Las noticias que llegan del estado de salud de Lamar Odom no son muy esperanzadoras. El exjugador de baloncesto, que salvó la vida de milagro tras ser encontrado inconsciente en un prostíbulo de Las Vegas donde estaba pasando un fin de semana plagado de drogas y alcohol, podría perder la capacidad de hablar y caminar. Así lo refleja la web ‘TMZ’, que recoge el precario estado de salud del deportista.
Odom, que arrastra un pasado de adicciones, está ingresado en el Cedars-Sinai Medican Center de Los Ángeles. Tal y como se desprende de sus informes médicos, sufrió hasta 12 derrames cerebrales desde su llegada al centro médico. Además, su capacidad motriz y el habla se ven muy afectados, aunque el equipo médico aún no se atreve a diagnosticar si es algo transitorio o permanente. Y a todo ello, hay que añadir que necesita un transplante de riñón.
Sin embargo, sus seres queridos no pierden la esperanza de que su recuperación sea completa. El deportista se encuentra bajo los cuidados de su mujer, Khloé Kardashian, que ha decidido cancelar su proceso de divorcio. «Es un momento muy delicado tanto para Lamar como para Khloé, y lo más sensato es supenderlo todo por el momento», aseguraron fuentes cercanas a la pareja a la revista ‘People’.
Parece ser que lo primero que hizo Odom al recuperar la conciencia fue prometerle a Khloé que «las drogas se han terminado». Una promesa clara que animó a Khloé a dejarse llevar por los sentimientos que aún guardaba hacia su marido y seguir a su lado. Además, la benjamina Kardashian podría emprender acciones legales contra un grupo de trabajadores del Cedars-Sinai Medican Center que han sido despedidos de forma fulminante tras intentar vender fotografías de Lamar en su habitación.
Fuente vanitatis.elconfidencial.com