Montevideo, Uruguay. María Borcelli dice que las ventas de cigarrillos en su quiosco bajaron desde que Uruguay prohibió que las cajetillas estén a la vista. Pero no es así en el resto de Latinoamérica, donde aún se exhiben junto a las golosinas para atraer a los niños.
Según un reporte publicado este martes por un grupo de ONGs antitabaco, las tabacaleras exhiben sus productos en los puntos de venta con llamativos mostradores dispuestos junto a dulces y juguetes. Y a la altura de los ojos de un niño, lo cual no sería por azar.
Estas «tácticas de exhibición en el punto de venta deben ser reconocidas como publicidad», reclama la publicista brasileña Regina Bielsa, citada en el informe basado en 14 países.
Pero las tabacaleras insisten en que no es el caso.
«Phillip Morris International no hace publicidad dirigida a menores de edad, ni utiliza imágenes dirigidas o que resulten particularmente atractivas a menores», dijo un portavoz de la PMI a la AFP, recordando que, además, toda exposición de los productos incluye las advertencias de salud.
Prohibir la exhibición del tabaco en los puntos de venta puede parecer una medida anodina al lado de otras más agresivas como vetar su consumo en espacios públicos o incorporar lúgubres advertencias en las cajetillas.
Pero parece tener efecto: «Afecta la venta, claro, porque toda mercadería que no se ve, no se vende», cuenta la quiosquera Borcelli.
El problema con la exhibición es que los niños se familiarizan con los nombres de las marcas e incorporan el hábito de fumar como normal, explica el estudio, titulado «Niños en la mira de la industria tabacalera».
«La estrategia es bien clara», dice a la AFP Patricia Sosa, directora para Latinoamérica de Tobacco-Free Kids, bajo cuya ala se realizó la investigación. «Sistemáticamente lo ponen (el tabaco) donde se venden dulces y golosinas».
De acuerdo a un informe de esta organización que discrimina por países, los ecuatorianos de 13 a 15 años son los más fumadores (28,6%) de Latinoamérica, seguidos de cerca por Colombia (27,6%). La menor prevalencia de tabaquismo se registra en Paraguay, con 7% en la misma franja etaria.
– Guerra al tabaquismo –
Según la Organización Panamericana de la Salud, el tabaco mata a 6 millones de personas al año en el mundo, un millón de ellas en América.
En Latinoamérica hay distintas legislaciones que buscan poner coto a su publicidad y promoción, y distintos niveles también de implementación de estas normas.
Paraguay, por ejemplo, no tiene ninguna regulación.
En Perú, Bolivia, Guatemala, Honduras y Venezuela, donde se prohíbe la publicidad, la industria despliega agresivas campañas dirigidas a niños y jóvenes no sólo en los puntos de venta, sino también a través de eventos, promociones y patrocinios, según el estudio.
En un punto intermedio están Argentina, México, Brasil, Colombia, Chile y Costa Rica, con restricciones más amplias. Pero Uruguay y Panamá son los que han ido más lejos al prohibir la exhibición de los productos.
Uruguay se convirtió en 2006 en el primer país de la región que prohibió fumar en espacios públicos. Desde entonces, el consumo de tabaco bajó 14,6% en adolescentes de 13 a 15 años.
Su guerra al tabaquismo le ha granjeado una demanda de la tabacalera Philip Morris International en 2010, que alega la violación del Tratado Bilateral de Inversión entre Uruguay y Suiza, país donde la multinacional tiene su sede.
El estudio fue realizado por la Fundación Interamericana del Corazón Argentina, la Aliança de Controle do Tabagismo e Saúde de Brasil, la Fundación Interamericana del Corazón México y Corporate Accountability International Colombia.