AFP 
Varios estados norteamericanos republicanos anunciaron rechazarán en lo sucesivo recibir a refugiados sirios, con la intención de evitar atentados similares a los ocurridos el viernes pasado en París, mientras que el presidente Barack Obama advirtió contra equiparar los «refugiados» con el «terrorismo».
En un correo destinado al presidente este lunes el gobernador de Texas, Greg Abbott informó que su estado «no aceptará refugiados sirios tras el ataque terrorista mortal de París».
«Un refugiado sirio parece haber participado en los ataques terroristas de París. La compasión humanitaria estadounidense podría ser explotada para exponer a los estadounidenses a un peligro mortal similar, explicó el gobernador del estado sureño del país.
Por su parte, el gobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, anunció por Twitter que se «opondría a la radicación de refugiados sirios», en este otro estado del sur del país.
Pero el presidente norteamericano Barack Obama recalcó este lunes desde Turquía la importancia de no «asimilar el tema de los refugiados con el tema del terrorismo».
«La gente que huye de Siria son quienes más sufren del terrorismo, son ellos los más vulnerables. Es muy importante que no cerremos nuestros corazones a las víctimas de esta violencia (…) ni empecemos a asimilar el tema de los refugiados con el tema del terrorismo», declaró Obama al término de la cumbre del G20.
«Es vergonzoso» oír a «la gente decir que solo podremos recibir a los cristianos y no a los musulmanes», agregó el mandatario.
Este domingo, el gobernador republicano del estado de Alabama, Robert Bentley, también había anunciado que se negaría a recibir refugiados sirios.
«Tras haber considerado atentamente los ataques terroristas de este fin de semana contra ciudadanos inocentes en París, me opondré a toda tentativa de trasladar a refugiados sirios a Alabama», afirmó Robert Bentley, gobernador de ese Estado del sureste de Estados Unidos.
«Yo no seré cómplice de una política que pone a los ciudadanos de Alabama en peligro», precisó el gobernador en un comunicado difundido el domingo.
También el gobernador del Estado de Michigan (norte), Rick Snyder, informó el domingo de una decisión similar, «teniendo en cuenta la terrible situación en París».
En un comunicado, Snyder dijo haber dado directivas para suspender «nuestros esfuerzos que pretendían aceptar a nuevos refugiados, hasta que el departamento estadounidense de Seguridad interior termine con una revisión completa de las medidas de seguridad».
«Vendrán días difíciles para el pueblo de Francia y él permanecerá en nuestros pensamientos y en nuestras oraciones», añadió Snyder, cuyo estado alberga a una de las más importantes comunidades procedentes de Medio Oriente.
«Es importante subrayar que estos ataques son realizados por extremistas y no reflejan la actitud pacífica de la población originaria de Medio Oriente», precisó.
Según el principal diario de Michigan, el Detroit Free Press, entre 1.800 y 2.000 refugiados han sido reinstalados en este estado durante el año en curso, entre ellos unos 200 sirios.
Varios candidatos republicanos a la presidencia destacaron el domingo que Estados Unidos no debería recibir a refugiados sirios, por temor a que militantes del grupo Estado Islámico se infiltren entre ellos.
Pero un responsable de la Casa Blanca afirmó que el país no corre ese riesgo y que el número de refugiados que deben ser recibidos en Estados Unidos es limitado y el proceso de verificación de seguridad es «sólido».
«No podemos cerrar nuestras puertas a estas personas», dijo el domingo a la cadena Fox News el consejero nacional adjunto para asuntos de seguridad de Obama, Ben Rhodes.
Ensegundos.do 
Amaury Mo 
