Muchas personas siguen dietas y ejercicios en una constante lucha contra la báscula que parece no tener fin. Sin embargo, el enemigo que impide lograr la silueta perfecta está escondido en escenarios que nunca imaginaste.
1 Aislarse de comidas en familia
Por ejemplo, un estudio de la Universidad de Minnesota publicado en el Journal of Pediatrics halló que en los convivios familiares se establecen conexiones emocionales entre los miembros, por lo que la comida tiende ser saludable. Evitar estas comidas sería contraproducente en ciertos casos.
2 Tener un hermano gordo
En tanto, tener algún hermano con sobrepeso incrementa las posibilidades de tener el mismo problema. De hecho el riesgo aumenta si éste es mayor y del mismo sexo, advierte un artículo publicado en American Journal of Preventive Medicine.
3 Restaurantes con música clásica
La ecuación Mozart, Vivaldi, más comida no sería recomendable si se quiere conservar la figura. Una investigación británica de las universidades de Leicester y Surrey Roehampton comprobó que se consumen más alimentos en lugares ambientados con música clásica.
4 Trabajar de noche
Si eres de los que trabajan en las madrugadas, que no te extrañe por qué te cuesta tanto bajar de peso. Y es que al alterar el ciclo fisiológico del sueño se provoca una disminución del gasto de energías al día, según un trabajo hecho por miembros del Instituto Médico Howard Hughes, en Texas.
5 Dormir poco
De igual forma, dormir poco es otro poderoso factor que modifica el metabolismo, y por consiguiente induce a comer más. Esto es porque se genera un mecanismo de adaptación para mantener la vigilia, sugiere un estudio publicado en American Journal of Clinical Nutrition.
6 El ambiente
Un grupo de investigadores de la Universidad de Granada concluyeron que algunas sustancias de desecho del pesticida DDT o el lindano, presentes en carnes y pescados grasos, favorecen el sobrepeso al acumularse en el tejido graso de las personas.
7 Ver televisión
Si eres de los que ven la comedia o están frente al televisor más de dos horas diarias, las probabilidades de desarrollar obesidad y tener diabetes aumentan 23% y 14% respectivamente, según un informe de la Universidad de Harvard.
8 Dejar la tv encendida
Aunado a esto, si te quedas dormido con el televisor encendido, el riesgo de subir de peso se duplica. Esto porque la exposición a la luz de la televisión reduce los niveles de la hormona responsable de controlar las alteraciones metabólicas contra la obesidad, explica Ahmad Agil, de la Universidad de Granada.
9 Deprimirse
Por otro lado, tener la autoestima por los suelos también deriva en aumento de barriga. El centro de recompensa que está dentro del cerebro se activa al comer alimentos ricos en grasas y azúcares. Con esto queda claro que para subir de peso sobran las razones.
Fuente Holadoctor.com