La lucha de fuerzas políticas por el control de la Liga Municipal Dominicana (LMD) vuelve a convertir a ese organismo en la “manzana de la discordia”, y esta vez, en un hecho inédito, pone de frente a dos partidos aliados, el de la Liberación Dominicana (PLD) y Revolucionario Dominicano (PRD), que sin embargo en este punto no logran afinidad.

Con antelación, Miguel Vargas Maldonado, presidente del PRD, expresó el interés de su partido de asumir la dirección de la LMD, pero en lo que parece una sagaz jugada del ajedrez político, el partido morado dio la primera señal de ratificar al actual incumbente, el reformista Johnny Jones.



Miguel Vargas

Informa el periódico El Nuevo Diario,  que la decisión oficialista de permanecer con Jones al frente de la Liga, se interpreta como una maniobra con el propósito de disminuir y restar fuerza al Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) de cara a su alianza con el Partido Revolucionario Moderno (PRM).



En efecto, la ruptura de más de una veintena de dirigentes reformistas que rechazan el pacto con el PRM para activarse con la reelección del presidente Danilo Medina, es parte del acuerdo para que Jones retenga la LMD, al menos por un año más, como se anunció.

La acción oficialista de armonizar con ese grupo de reformistas, enfrió los ánimos en los predios de un PRD que veía (aun ve) muy probable asumir la secretaría general del organismo para lo municipal.

Incluso, en algunos sectores del perredeismo se ha llegado a plantear que la situación generada en torno a la Liga Municipal Dominicana podría lesionar y hasta dar al traste con la alianza PLD-PRD.

Aunque una fuente del PRD consultada este por El Nuevo Diario, dejó claro que el tema de la LMD no forma parte del pacto entre las dos organizaciones, sino que se trata de una aspiración legítima y circunstancial del partido blanco.

Las esperanzas del PRD siguen vivas, si se toma en cuenta que pese al anuncio de Ignacio Ditrén, delegado del PLD para asuntos municipales, es el Comité Político de ese partido que tendrá la última palabra respecto a la Liga Municipal Dominicana.

Por el Partido Revolucionario Dominicano postulan para la secretaría general de la LMD, Neney Cabrera, Julio Maríñez y Henry Sarraff. Miguel Vargas ha sido firme en el propósito de que uno de ellos alcance el puesto con sede en la avenida Enrique Jiménez Moya, de la capital.

Aunque parece improbable, se plantea un “cruce estratégico” a última instancia, que consistiría en que los alcaldes del PRM y el PRSC (aliados) sumen votos para sacar a Jhonny Jones de la Liga, siempre que el PRD mantenga el interés de dirigirla después de que el CP decidiera mantenerlo allí.

En ese cuadro, el PRSC jugaría a contrarrestar la estrategia con los más de 20 de sus dirigentes que se quedaron a apoyar la reelección de Medina, mientras el PRM apostaría a crear discordia y mellar de algún modo la alianza PLD-PRD.

Este miércoles, Miguel Vargas Maldonado se reunió con los legisladores perredeistas con quienes abordó de manera exclusiva el tema de la LMD, y el curso que lleva la alianza con el PLD.

La asamblea para decidir quién dirigirá los destinos de la Liga Municipal Dominicana, se llevará a cabo el martes 26 de este mes.