ObamaWASHINGTON.- En su proyecto de presupuesto para el año fiscal federal 2017, el presidente Barack Obama ha insistido hoy en sus propuestas dirigidas a atender la crisis fiscal de Puerto Rico, incluido encaminar la paridad en el programa de Medicaid y a favor de una reestructuración abarcadora de la deuda pública. Aunque advierte que levantar totalmente el tope en todos los territorios dependerá de que se cumpla con ciertos parámetros en el manejo de los asuntos fiscales, la intención es que Puerto Rico tenga acceso a cerca de $27,000 millones adicionales en fondos de Medicaid durante la próxima década.

La propuesta del presidente Obama persigue que de 2017 a 2026 se puedan desembolsar hasta $29,600 millones adicionales en fondos de Medicaid para Puerto Rico y los los territorios. De ese total, Puerto Rico recibiría cerca del 90%.



La proyección divide las asignaciones a partir del año fiscal en cantidades que van desde $320 millones adicionales en 2017  hasta $5,300 millones en 2026. Para 2020, se vería, bajo el plan Obama, un aumento significativo, pues los fondos adicionales totalizarían $2,800 millones, unos $1,000 millones más que en estos momentos.

 «El Estado Libre Asociado de Puerto Rico está en el medio de una crisis fiscal y económica, la cual, sin acción del Congreso, puede convertirse en una crisis humanitaria», indica una hoja informativa de la Casa Blanca sobre el presupuesto.



La mayoría republicana del Congreso ha advertido que el proyecto del presidente Obama no va a ser considerado por los comités que manejan el presupuesto federal, pero, la medida permite volver a presionar a favor de los reclamos incluidos en octubre pasado en el plan del Ejecutivo federal para lidiar con la crisis fiscal y de deuda pública de la isla.

En el Congreso, hasta el momento, la única medida que parece haber ganado tracción es la idea de crear una junta federal de control o supervisión fiscal sobre el gobierno de Puerto Rico, aunque el presidente del Comité de Recursos Naturales de la Cámara de Representantes, el republicano Rob Bishop (Utah), prepara legislación que puede incluir algún lenguaje que incentive una reestructuración de la deuda e iniciativas energéticas, informó Elnuevodia.

Junto a la crisis de deuda, el gobierno de Puerto Rico ha advertido que va camino a un precipicio fiscal en la industria de la salud, ante el agotamiento de los fondos de Medicaid de la reforma federal de salud (Obamacare), que estaban supuestos a durar hasta el año fiscal 2019, pero se acaban a un ritmo acelerado. Esos fondos de Obamacare representan cerca de $1,200 millones anuales del presupuesto de Mi Salud y son independientes a los $329 millones anuales de la asignación permanente de Medicaid, y los $183 millones anuales del programa de salud infantil (Chip).

Con respecto a la reestructuración de la deuda, el presidente Obama vuelve a acompañar esa idea con una junta de supervisión fiscal, que recomienda «sea fuerte» y busque ayudar a fortalecer la gobernanza fiscal en Puerto Rico.

Alejados de la idea de limitar una reestructuración a las empresas públicas, por medio del capítulo 9 como antes se quería, el gobierno del presidente Obama pide, como en octubre, una autorización «reservada exclusivamente» para los territorios que permite un reajuste mucho más abarcador de las obligaciones financieras del gobierno de Puerto Rico.

El presupuesto del presidente Obama pide además la extensión a Puerto Rico del crédito contributivo federal por ingresos devengados (Eitc) y paridad en los fondos del programa de Medicare para hospitales que sirven un alto número de personas escasos recursos, conocido en inglés como DSH.

«Cada una de esas propuestas se basa en proyectos de ley que presenté», indicó el comisionado residente en Washington, Pedro Pierluisi.

El gobernador Alejandro García Padilla, por su parte, agradeció a «la administración Obama por defender a los 3.5 millones de ciudadanos americanos en Puerto Rico que se enfrentan una crisis sin precedentes».

En la hoja informativa, la Casa Blanca indica que el presidente «sigue comprometido con el principio de libre determinación de Puerto Rico» y sostiene que en el referéndum local de noviembre de 2012, fue claro que los puertorriqueños quieren resolver el debate de status.?

En total, el presidente Obama envió al Congreso un presupuesto de alrededor de $4 billones (trillions en inglés). Los republicanos han indicado, no obstante, que estudiarán sus propias propuestas y ni siquiera se proponen citar a una audiencia al director de presupuesto del gobierno del presidente Obama.?