Cuba dará la bienvenida al presidente estadounidense Barack Obama, pero advirtió que no hará concesiones políticas ni renunciará a «uno solo de sus principios» revolucionarios y antimperialistas.

Obama «será bienvenido por el Gobierno de Cuba y su pueblo con la hospitalidad que los distingue y será tratado con toda consideración y respeto», pero «nadie puede pretender que para ello, tengamos que renunciar a uno solo de sus principios, ceder un ápice en su defensa», dijo un editorial del diario oficial Granma.



Obama llorando

«Cuba reitera a su vez, plena disposición a mantener un diálogo respetuoso con el Gobierno de los Estados Unidos y a desarrollar relaciones de convivencia civilizada. Convivir no significa tener que renunciar a las ideas en las cuales creemos y que nos han traído hasta aquí, a nuestro socialismo», enfatizó.



Añadió que «no se puede albergar tampoco la menor duda respecto al apego irrestricto de Cuba a sus ideales revolucionarios y antimperialistas».

Según el órgano oficial del Partido Comunista de Cuba (PCC, único), la visita se realizará entre «el 20 y el 22 de marzo próximos» y «forma parte del complejo proceso hacia la normalización de los vínculos bilaterales, que apenas se inicia y que ha avanzado sobre el único terreno posible y justo: el respeto, la igualdad, la reciprocidad y el reconocimiento de la legitimidad de nuestro gobierno».

Tras el proceso de deshielo iniciado el 17 de diciembre de 2014, y el restablecimiento de relaciones el 20 de julio de 2015, «se ha llegado a este momento como resultado de la heroica resistencia del pueblo cubano y su lealtad a los principios, la defensa de la independencia y la soberanía nacionales, en primerísimo lugar», subrayó.

«Esta será una oportunidad para que el Presidente de los Estados Unidos aprecie directamente una nación enfrascada en su desarrollo económico y social, y en el mejoramiento del bienestar de sus ciudadanos», dijo.

De lo que se trata en los vínculos con los Estados Unidos «es que ambos países respeten sus diferencias y creen una relación basada en el beneficio de ambos pueblos», subrayó.