Los Angeles, Estados Unidos. La actriz mexicana Kate del Castillo reconoció ayer haberse acercado a Joaquín «El Chapo» Guzmán, el narcotraficante más poderoso del mundo, para llevar a la gran pantalla su vida.
«Sí, fui amable porque quería su historia», explicó la artista en una entrevista con la periodista estadounidense Diane Sawyer en su casa de Los Ángeles, en la que fue su primera aparición en televisión desde que se dio a conocer su vínculo con el capo de la droga.
«Necesito crear mis propias cosas, no puedo esperar a que (el cineasta) Steven Spielberg me llame. La vida pasa muy rápido y ya tengo más de 40 años. Eso no facilita las cosas, pero necesito comenzar con un gran proyecto para llamar la atención de la gente importante de Hollywood», aseguró.
«El Chapo», que fue recapturado en enero, siempre había tenido la idea de convertir en película su vivencia como uno de los hombres más perseguidos y poderosos del mundo.
Pero el proyecto comenzó a dibujarse cuando los abogados de «El Chapo» contactaron a Kate del Castillo: el capo la había elegido fascinado por su actuación en la telenovela «La Reina del Sur» (2011), donde interpreta a Teresa Mendoza, la líder de una red narcotraficante que opera en Europa.
¿Se enamoró Guzmán de Del Castillo? «Creo que era un admirador, no lo sé, tal vez sí, habría que preguntarle», respondió la artista, que en los últimos días a contado su versión de los hechos en las revistas Proceso y The New Yorker.
Ambos se intercambiaron mensajes de texto en los que ella le dijo sentirse protegida por él y él le preguntó por su familia.
En cualquier caso, la actriz aceptó embarcarse en la cinta con la condición de «no contar ninguna mentira» -«todos sabemos quién es él», advirtió a sus interlocutores- y de no recibir «ni un centavo» del narcotraficante.
Dos productores, cuyos nombres no fueron revelados, aceptaron poner el dinero e introdujeron en el proyecto al oscarizado actor Sean Penn.
Del Castillo dijo que pensó que «esa gran estrella Hollywood» le daría «más credibilidad», pero que ahora se siente traicionada por el intérprete.
La actriz le acusa de haberla utilizado para escribir el artículo publicado en la revista Rolling Stone. «Creo que nunca le interesó la película», afirmó.
Del Castillo, de 43 años, contó el miedo que sintió al conocer a «El Chapo» en octubre de 2013, cuando estaba prófugo de la justicia.
«Sus ojos te penetran, como un puñal. Te hipnotizan de una forma que no puedes girarte. Da miedo porque es realmente fuerte», precisó.
Sin embargo, defendió que «hay amor en algún lugar dentro de él».
Las autoridades mexicanas aseguran que el rastreo de los mensajes de texto entre la actriz y el narcotraficante facilitaron su detención el 8 de enero en el estado de Sinaloa.
«El Chapo» había ridiculizado al gobierno del presidente Enrique Peña Nieto al escapar seis meses antes de una cárcel de máxima seguridad.
La fiscalía también investiga si el capo invirtió en la empresa de tequilas de la actriz, pero la mexicana volvió a negarlo.
«Necesito resolver mis problemas legales para seguir adelante con mi vida», aseguró Del Castillo. Pero desde que estalló el escándalo, no ha puesto los pies en su país y sigue en contacto con «El Chapo» mediante sus abogados.