La Paz, Bolivia. El presidente boliviano, Evo Morales, se sometió a un examen de ADN para determinar la paternidad de un supuesto hijo con su expareja Gabriela Zapata, informó el abogado del gobernante.
«El presidente Evo Morales, como cualquier ciudadano y cumplidor de la Ley, se ha presentado y se ha sometido a la prueba que la juez (del menor) ha dispuesto», señaló Gastón Velásquez, abogado de Morales, al canal privado de televisión ATB.
Morales acudió a las oficinas del estatal Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), que por ley debe realizar la prueba sanguínea.
Velásquez acotó que Zapata se negó a efectuarse la prueba e incluso a presentar al supuesto niño para el examen, pues consideró que el procedimiento al padre, madre e hijo se debió efectuar de manera simultánea, algo que no ocurrió.
Zapata, presa acusada de enriquecimiento ilícito, fue llevada al IDIF en La Paz después de Morales, cuando éste abandonó el lugar, en un nuevo episodio de corte novelesco que estalló a principios de febrero pasado.
No hubo versión de la juez sobre si ordenará una nueva audiencia para que Zapata se someta al examen de ADN, así como al infante.
El presidente reconoció en un principio que en 2007 sostuvo una relación con Zapata y que al poco tiempo nació un infante, pero que éste murió, aunque luego el oficialismo manejó la versión de que el menor nunca existió, mientras que Zapata se mantiene firme con su aseveración de que el niño vive.
Zapata fue gerente de la firma china CAMC, con millonarios contratos con el estado boliviano. El propio gobierno ha reconocido que ella despachaba irregularmente desde dependencias públicas, lo que abrió denuncias opositoras de tráfico de influencias.
Ante la versión de que había un hijo, Morales presentó semanas atrás una demanda contra Zapata para que el menor sea presentado. Ella aseguró hace dos semanas que su pequeño fue llevado ante el juez, aunque el abogado del mandatario informó que no tenían conocimiento formal del hecho.
El caso saltó a la luz pública pocos días antes del referendo convocado por Morales, el 21 de febrero, en donde pedía al pueblo que le autorice a presentarse a un cuarto mandato (2020-2025).
El mandatario, en el poder desde 2006, perdió la consulta, su primera derrota en las urnas, y consideró que el manejo que la oposición hizo del caso incidió en su derrota.
