Miami, Estados Unidos. Una mujer en Estados Unidos compró un congelador usado por 30 dólares, pero no esperaba que viniera con un bono: el cadáver de su vecina.
La policía de Goldsboro, en Carolina del Norte (sureste), reveló este viernes la identidad de la difunta como Arma Ann Roush, de 75 años.
El viernes pasado, los oficiales respondieron a un llamado al 911 «en referencia al descubrimiento de posibles restos humanos (…) Los restos estaban localizados en un congelador tipo baúl», señaló la policía en un comunicado.
La mujer que hizo este cruento hallazgo había comprado el congelador a su vecina Marcella Jean Lee, la hija de Roush, a principios de mayo, pero lo abrió apenas el viernes pasado.
Según el canal CBS, la mujer demoró tres semanas en abrirlo porque Marcella Jean Lee le había dicho al vendérselo que, en realidad, ese congelador era una «cápsula de tiempo».
No se revelaron más detalles sobre los supuestos poderes espacio-temporales de la máquina.
La policía añadió que Marcella Jean Lee, de 56 años, es buscada por no informar sobre la muerte de su madre, con quien vivía.
También detalló que la oficina forense reportó la causa de muerte como «desconocida y sin aparentes signos de que haya habido un acto criminal».
«El cuerpo estaba intacto y no estaba desmembrado de ninguna manera», añadió la policía, que ahora investiga «cómo llegó al congelador».