Cleveland, Estados Unidos. Los astros canasteros LeBron James y Kyrie Irving, de los Cavaliers, deben seguir sacando chispa de la cancha si quieren seguir con vida el jueves en la serie final de la NBA ante los Warriors.
Los Golden State Warriors, campeones defensores, aventajan a los Cleveland Cavaliers de LeBron, por 3-2, en una serie al menor de siete.
Los Cavaliers pusieron alma, corazón y vida en la cancha el lunes para vencer a domicilio a los Warriors 112-97 y manternerse en la pelea.
Irving y LeBron encestaron 41 puntos cada uno, para convertirse en los primeros dos jugadores de un mismo equipo con esa producción en la historia en un partido de la final de la NBA.
El tope regresa ahora a Cleveland, donde los Cavaliers tienen balance en estos playoffs de 8-1, un aval a tener en consideración pues de ganar los Cavs empatarían la serie y volverían para efectuar el séptimo encuentro en Oakland.
La tarea para Irving y LeBron no será fácil, pues suponiendo que salgan victoriosos este jueves y regresen a Oakland, los Warriors podrían salir por la puerta ancha y llevarse su segunda corona consecutiva.
Además, sería la quinta corona después de los títulos logrados en 1947 y 1956 cuando tenían sede en Filadelfia y 1975 y 2015 después de su traslado a la zona de la Bahía de San Francisco en 1962.
Los Cavaliers habían estado debajo 3-1 para el quinto partido en Oakland, y aunque ningún equipo se ha recuperado de esa desventaja en una final de la NBA, lucharon a capa y espada para continuar una lucha que no ha terminado.
Cleveland lo sabe, ningún equipo en 32 finales de la NBA ha podido dar vuelta a una serie que iba perdiendo 3-1, pero la vida está llena de sorpresas y con LeBron en la cancha el rival no puede dar nada por seguro.
El cuatro veces jugador más valioso de la NBA y ganador de dos títulos con los Miami Heat, que está en su sexta final consecutiva y séptima de su carrera, seguro dará todo para que sus Cavaliers sigan en la pelea.
– Curry y Thompson piensan distinto –
Empero, los también astros Stephen Curry, ganador por segundo año consecutivo del premio MVP (Jugador Más Valioso) de la temporada regular, y Klay Thompson, piensan todo lo contrario a LeBron.
Es cierto que los ´Guerreros´ han jugado más como conjunto, ya que otros además de Curry y Thompson han sobresalido, como ha sido el caso de Draymond Green, quien fue suspendido en el Juego 5 por acumulación de faltas graves, Andre Iguodala y Harrison Barnes, destacados en las tres victorias del equipo en esta etapa.
Por Golden State sobresalieron en el último partido Thompson y Curry, con 37 puntos el primero y 25 el segundo.
No obstante los buenos resultados de la segunda unidad, el destino de los Golden State depende mucho, sobre todo en el último cuarto y a la eficacia de sus triples, de Curry y Thompson.
Golden State, con su récord de 73 victorias de temporada regular, seguirá buscando también otra marca, ya que suponiendo que cedan el jueves y el domingo ganen en casa lograrían 51 victorias como locales con la combinación de triunfos de la campaña regular y los playoffs.
Ya con la victoria del viernes pasado, los Warriors dejaron otra nueva marca, pues con la suma de esos 73 triunfos en la temporada regular y con las de los playoffs registran 88, una más que la que establecieron los Chicago Bulls de Michael Jordan en la campaña de 1995-1996.
Además, Curry y Thmpson saben imponerse a puro triples. Lo demostraron en el segundo encuentro en Cleveland, cuando ayudaron al equipo a anotar 17 disparos de tres puntos, una nueva marca para un partido de la final, dejando atrás a los San Antonio Spurs, que habían logrado en esta etapa 16.