A pesar de que el cáncer de pulmón puede afectar a cualquier persona independientemente de su edad, las mujeres fumadoras son más susceptibles a desarrollarlo, ya que tienen el doble de probabilidad de tenerlo en comparación con los hombres, debido a que este género tiene más dificultad para superar la adicción a la nicotina.
Si a lo anterior se suma que entre el 10 y 15% de los casos diagnosticados han sido en personas que nunca han fumado, la educación sobre la prevención y diagnóstico tempranos sobre esta enfermedad son vitales para que la probabilidad de supervivencia sea mayor, ya que cada 30 segundos fallece una persona y solo una de cada 10 están con vida después del diagnóstico.
Datos publicados por la Coalición Global del Cáncer de Pulmón indican que el fumador pasivo (persona que pese a no consumir cigarrillos aspira las sustancias tóxicas y cancerígenas provenientes de su combustión) ahora es reconocido como uno de los mayores contribuyentes en la prevalencia del cáncer de pulmón, el cual es responsable de más muertes que el cáncer de mama y próstata juntos.
Este tipo de cáncer que se origina cuando las células del pulmón se convierten en células anormales y comienzan a crecer en forma descontrolada, puede desarrollarse cuando existen estilos de vida modificables o no modificables.
Un ejemplo de factor modificable es el fumado, ya que una persona puede decidir dejar este hábito y de esa manera disminuir el porcentaje de muertes por cáncer de pulmón debido a esto, el cual es de aproximadamente 80%. Sin embargo, otros factores como los antecedentes familiares o la genética se consideran factores no modificables ya que los parientes directos de las personas que han padecido cáncer de pulmón pueden tener un riesgo ligeramente mayor de padecerlos ellos mismos, según Sociedad Americana del Cáncer.
Acerca del cáncer de pulmón
Del 100% de los casos de cáncer de pulmón, un 85% es de células no pequeñas y de ese porcentaje entre un 3 a 6% tienen la mutación del gen ALK. Ocurre tanto en hombres como en mujeres, sigue siendo difícil de tratar y cuando es diagnosticado, generalmente la enfermedad ha avanzado a otras partes del cuerpo, de manera que la consulta médica es lo más importante para diagnosticar a tiempo el tumor.
De hecho, cuando el diagnóstico del tumor se hace en estadío I existe un 49% de probabilidad de supervivencia, cuando el tumor se encuentra en estadío II y III la tasa de supervivencia es de un 15% y cuando se encuentra en estadío IV es sólo de un 3%. Sin embargo entre un 70 a 80% de los pacientes al momento de ser diagnosticados, el cáncer ya se ha esparcido a otras partes del cuerpo, lo que compromete la sobrevida del paciente.
Gracias a las investigaciones médicas y a los avances de la tecnología, los pacientes ahora pueden tener acceso a tratamientos novedosos que en lugar de enfocarse en el tratamiento de los síntomas, se centra en la identificación y atención de las causas que los provocan. A esto se le conoce como Medicina Personalizada en la cual se adapta el tratamiento a las características biológicas de cada persona. Esto facilita la comprensión de la enfermedad desde el punto de vista molecular y como resultado, se puede predecir cuál será la respuesta del paciente y el riesgo individual de desarrollar una enfermedad, lo que sin duda permite brindar la mejor alternativa de tratamiento.
