El “No” a la paz con las FARC en Colombia lideró este domingo por cerrado margen el conteo de votos del crucial plebiscito sobre el acuerdo para terminar 52 años de conflicto armado con esa guerrilla.
Con el conteo de 99,98% de las mesas de votación, el “No” (50,21%) superó al “Sí” (49,78%), según el último reporte preliminar de la autoridad electoral.
En términos de votos, el rechazo al acuerdo de paz se impuso por un poco más de 60.000 preferencias.
Unos 34,9 millones de colombianos fueron convocados a pronunciarse sobre el pacto firmado el 26 de septiembre entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno de Juan Manuel Santos, en una jornada que transcurrió con tranquilidad.
Sin embargo, la participación en el proceso fue más bien baja, y solo el 37,43% de las personas habilitadas concurrió a las urnas (cifra superior a los 13 millones de electores).
En este marco, algunos políticos locales atribuyeron la baja participación a las consecuencias del paso del Huracán Matthew por el Caribe, lo que significó que se solicitara al Consejo Nacional Electoral que extendiera la jornada de votación en dos horas. Sin embargo, el CNE declinó aceptar esta solicitud.
Sin un “Plan B”
Los colombianos dicen estar hartos de la guerra, pero muchos rechazan hacer concesiones a las FARC, que marcaron la historia reciente con masacres, secuestros, extorsiones y desapariciones forzadas.
Lo negociado desde 2012 en La Habana fue rechazado porque aunque 6.377.482 personas votaron por el “Sí”, superando el umbral de 4,5 millones de votos requeridos para avalar el acuerdo, fueron más las adhesiones por el “No” (6.431.376)
El gobierno ha dicho no tener un plan B si triunfaba el voto negativo a la pregunta: “¿Apoya usted el acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera?”.
Los últimos sondeos daban ganador al “Sí”, con un 20% de adhesiones frente al “No”, firmemente apoyado por el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010).
“La paz es ilusionante, los textos de La Habana decepcionantes”, dijo más temprano el exmandatario y actual senador, para quien el acuerdo otorga impunidad a los rebeldes y encamina al país hacia el “castrochavismo” de Cuba y Venezuela.
AFP
