Una mujer rusa de 33 años llamada Anna Ozhigova saltó desde lo alto de un edificio con su hijo dormido en brazos y causando la muerte instantánea de ambos.
Según informa Daily Mail, la mujer tomó la terrible desición luego de que su marido le hiciera un chiste sobre su nariz después de una cirugía plástica que la dejó con las fosas nasales ligeramente más grandes. El hombre habría hecho el sonido de un cerdo (oink) cuando la vio con su nariz operada.
Sus amigos dicen que la cirugía fue el detonante para el fracaso de su matrimonio, y lo que la llevó a una separación de su marido, Oleg Ponomarev, y una cadena de acontecimientos que la dejó sin esperanza.
Ella saltó del apartamento de sus padres en en la ciudad siberiana de Omsk el jueves pasado, junto a su hijo de 8 años que estaba dormido.
La policía de Rusia reveló una nota de la mujer antes de suicidarse donde aseguraba: «No puedo aceptar la idea de que yo voy a ser así para siempre.»
Mira las fotos:
Anna Ozhigova entró en una profunda depresión después de una cirugía de nariz.
Amigos cercanos aseguran que la cirugía acabó con el matrimonio y la vida de la mujer.
Anna decidió quitarse la vida y llevarse a su hijo de 8 años con ella.
El pequeño fue encontrado muerto a pocos metros de su madre.
