Denuncia. El agresor admitió haber abusado sexualmente a su hijastra desde el 2015. La víctima dice que estaba amenazada.
Ref. Fotografia: Molestia. Los pobladores de San Julián indignados del abuso lo pasearon por toda la plaza con su letrero de violador.
Con un letrero colgado en el pecho de ¡Soy violador! y escoltado por policías fue obligado a caminar alrededor de la plaza de San Julián, Víctor Gutiérrez Rosas (41), acusado de abusar de su hijastra de 14 años desde el 2015.
Los pobladores, enterados de los vejámenes a que era sometida la muchacha, se apersonaron hasta el comando provincial de ese municipio en el afán de escarmentar al denunciado, pero la intervención de sus dirigentes vecinales frustró la intención y convenció que el agresor se gane el rechazo del pueblo caminando con su letrero.
El fiscal de San Julián, Hugo Chávez, informó que el caso fue denunciado por el tío de la víctima, G.L., quien alertado por el hermano mayor de la adolescente que su padrastro la abusaba sexualmente, condujo a la víctima hasta la Defensoría de la Niñez donde en una entrevista sicológica acabó revelando los vejámenes.
Admitió y luego lo negó. En principio Gutiérrez admitió la comisión del delito, pero ante el fiscal se acogió al derecho de guardar silencio para no complicar su situación. El padrastro fue sometido ayer a su audiencia cautelar donde un juez mixto ordenó su traslado a la cárcel de Palmasola.
El informe médico forense elaborado por Alexis Espinoza confirmó desgarre antiguo de la víctima, quien manifestó que desde hace año y medio venía sufriendo ataques sexuales de su padrastro, quien aprovechaba que la madre salía a trabajar para violarla. “La chica dice que tenía miedo y estaba amenazada de muerte por el agresor”, dijo el fiscal. Los pobladores advirtieron aplicar el mismo castigo a los violadores.
Fuente: Eju.tv
