La historia del Grupo Villar Hermanos la empezo? a escribir Generoso Villar hace 30 an?os sin darse cuenta, cuando en 1984 acepto? la propuesta de su amigo Marcelino de Leo?n de administrar una bodega en el sector Gazcue de Santo Domingo.
Generoso, al que todos llaman Carlos sin imaginar que su nombre de pila es otro, agoto? dos años de trabajo en ferreterías ajenas en su natal Bani?, provincia Peravia, antes de decidir mudarse a la capital para emprender el negocio de venta de alimentos y bebidas al detalle, en la parte norte de la esquina que conforman la avenida Independencia y la calle Pasteur.
“No lo pense? dos veces, porque teni?a la seguridad de que donde mi compadre Marcelino poni?a el ojo, el negocio seri?a exitoso”, comenta Generoso a Forbes.
Grupo Villar Hermanos es un conglomerado empresarial integrado por una bodega, una panaderi?a, una reposteri?a, una productora de cafe?, un restaurante, una ferreteri?a y una fa?brica de agua y hielo.
El empresario recuerda que arrendaron el local por 10 dólares y que cuando llego? a la capital se inquietó porque la zona estaba un poco despoblada. Era una zona residencial y se encontraba rodeada por algunos hoteles.
Expansión de los negocios
En febrero de 1992 abrieron las puertas de una pequen?ita panaderi?a a la que le pusieron el letrero Villar Hermanos.
Esa pequen?a panaderi?a pronto se convirtio? en reposteri?a y en 1993 evoluciono? al Restaurante Villar Hermanos, que hoy se reconoce por la calidad de su servicio.
“Al ser una panaderi?a, dependi?amos mucho de los obreros, de los ayudantes, para preparar el pan de hoy para hoy. Vimos que si ellos nos haci?an algu?n boicot eso afectari?a al negocio.”, dice.
Fue asi? como iniciaron una cafeteri?a que vendi?a emparedados y bebidas y luego almuerzos.
Villar narra que el primer di?a cocinaron dos libras de un moro de guandules “que quedo? muy bueno” y una libra de espaguetis que sirvieron en platitos desechables para llevar, porque no contaban con mobiliario.
De dos mesas y ocho sillas pla?sticas en aquellos inicios, el restaurante Villar Hermanos ahora tiene unas 120 mesas que ocupan un promedio de 3,000 visitantes itinerantes diarios. En su cocina se preparan alrededor de 1,000 platos al di?a so?lo de almuerzo, sin contar los platos que se preparan a la carta sin arroz.
En los aproximadamente 6,000 metros que ocupa su infraestructura, Villar Hermanos es sobre todo panaderi?a y el restaurante que ofrece comida criolla y a la carta, desayuno y cena. En segundo plano quedan los servicios de alquiler de cuatro salones para eventos y un garden tent que acoge unas 30 mesas.
Para cumplir con otra demanda del restaurante y la panaderi?a fue que tambie?n nacio? en 2001 la fa?brica de agua y de hielo, que exhibe una produccio?n diaria de 6,000 botellones, 36,000 botellitas y 6,000 fundas de hielo.
Justo en esta parte de la conversacio?n con Forbes entro? al despacho de Carlos Yadimil Villar, hijo de don Generoso, que se encarga de la parte de las ventas y los negocios del grupo.
Carlos Yadimil esta? convencido de que en planta de agua hay un enorme potencial para hacer que crezcan au?n ma?s los negocios.
Comenta que esta?n en los aprestos de invertir alrededor de 3.2 millones de dólares (mdd) para expandir su produccio?n y distribucio?n a nivel nacional.
Ya han adquirido varios camiones y esta?n a la espera de que lleguen nuevas maquinarias para envasado y etiquetado que compraron en el extranjero.
“De aqui? a cinco an?os yo veo que esta empresa habra? logrado la meta de la distribucio?n masiva de sus productos en el mercado local y una expansio?n en te?rminos de sucursales de la fa?brica de agua”, asegura.
Villar Hermanos ya esta? exportando agua a la isla San Marti?n y estudia la factibilidad de llevar su producto a otras islas de las Antillas menores.
Se trata de un nicho de negocio de muchas oportunidades en el pai?s, ya que —segu?n el Instituto Nacional de Aguas Potables—81% de la poblacio?n dominicana consume agua embotellada porque desconfi?a de la calidad del li?quido que sale de los grifos de sus hogares.
Pero, a pesar de esa ventaja, los Villar Hermanos no tienen el camino fa?cil para alcanzar sus metas, tomando en cuenta lo competitivo que es el mercado.
La produccio?n nacional de ese sector tiene un movimiento comercial que ronda los 64.6 mdd anuales y genera ma?s de 9,000 empleos directos, de acuerdo con estimaciones de la Asociacio?n Dominicana de Empresas Embotelladoras de Agua (Adeagua).
Esas cifras representan la produccio?n de apenas la mitad de las compan?i?as que comercializan el producto, pues Adeagua ha denunciado que el mercado informal domina la otra mitad del mercado.
No obstante, Villar Hermanos tiene otro proyecto que es la apertura de un gran supermercado. “Vamos a iniciar una cadena de supermercados, con miras a que de aqui? a 10 an?os tengamos 10 sucursales abiertas”, comenta el presidente del grupo.
Comunicación efectiva es la clave del éxito
Generoso asegura que la clave del e?xito de esa empresa familiar esta? en la unio?n de sus integrante y la comunicacio?n que prima entre ellos: “Nosotros nos reunimos una vez a la semana, hermanos, primos, sobrinos e hijos para comentar diversos temas, asi? sea de negocios como de la familia. Todos opinan y sus sugerencias son tomadas en cuenta”.
Dice que ninguno de los ejecutivos toma una decisio?n sin antes consultarla con los dema?s. Precisamente la pra?ctica de una comunicacio?n efectiva entre la primera y la segunda generacio?n , a trave?s de un sistema de gestio?n de la empresa basado en “estructuras de gobierno de la familia”, es la primera recomendacio?n de la firma consultora Exaudi Family Business Consulting.
Lisa Morel, socia directora de la firma en Repu?blica Dominicana, explica que el centro de la toma de decisiones seri?a el Consejo de Familia, un cuerpo en el que la familia puede dirimir sus intereses relacionados con la preservacio?n, el crecimiento y la transferencia de la riqueza compartida.
El hecho de ser generaciones distintas no les ha representado inconvenientes, sino que ha logrado complementar con e?xito la experiencia con la vanguardia.
Mientras la segunda generacio?n hace negocios vi?a WhatsApp con un fabricante chino que le suple la materia prima de los envases para el agua, la primera generacio?n ni siquiera porta tele?fono celular.
Fuente: https://www.forbes.com.mx/