El ex espía británico del MI6 que elaboró el informe con datos aún no verificados que revelarían vínculos y presiones entre el gobierno ruso y Donald Trump teme una represalia de la inteligencia rusa y huyó de su casa por seguridad.

La casa de la que huyó (Reuters)

Según informó este jueves el Daily Telegraph, Christopher Steele, ex agente de 52 años identificado por The Wall Street Journal como el autor del dossier, abandonó el miércoles su domicilio de Surrey (al sur de Londres), al tomar conocimiento de que su nombre iba a ser revelado.



Steele, que según el tabloide espió en Moscú para la inteligencia británica en los años 90, es uno de los fundadores de la agencia de investigación Orbis Business Intelligence Ltd, con sede en la capital inglesa. La firma es la que habría sido contratada el año pasado para recabar información sobre los vínculos del entonces candidato republicano con Moscú.

El periódico británico informa que Steele abandonó el martes su casa en Surrey, sur de Londres, al darse cuenta de que su nombre iba a aparecer en los medios y ahora cree que su seguridad esta en riesgo. Pese a no tener confianza con los otros residentes del vecindario, le pidió a uno de los vecinos que cuide a su gato, ya que se ausentaría por «unos días».



«No estoy seguro de dónde se fue o cómo contactarlo. Realmente no sé mucho sobre él, excepto el hecho de saludarlo. Somos bastante reservados aquí, solo sé que tiene una suerte de consultora como negocio», manifestó el vecino que conversó con el Telegraph.

El trabajo de Steele fue financiado primero, según el diario, por los republicanos opositores a Trump y después por los demócratas, durante la campaña para las elecciones estadounidenses de 2016. Según se desprende del informe, los servicios secretos rusos tienen material sensible sobre el presidente electo que podría ser utilizado en su contra.

El dossier, de 35 páginas, había circulado en manos de políticos y periodistas desde octubre, antes de la elección, pero su existencia sólo fue publicada cuando las oficinas de inteligencia de EEUU informaron a Trump y a Barack Obama de su existencia, en una reunión informativa en la que presentaron un resumen.

Trump, que asumirá el cargo el próximo 20 de enero, calificó las acusaciones de falsas y criticó a los medios con vehemencia. «Algo así nunca se debería haber escrito, nunca debería haber existido y desde luego nunca debería haberse publicado», afirmó, aunque se mostró más seguro en acusar a Rusia como culpable de los hackeos al Partido Demócrata.

La consultora Orbis, fundada en 2009 por Steele junto a su socio, Christopher Burrows, afirma en su web disponer de recursos de investigación sofisticados para empresas. Burrows, por su parte, optó por no confirmar si Orbis fue la encargada de realizar el polémico informe.

Fuente Infobae.com