Las autoridades de Austria dictaminaron que una mujer llamada Estibaliz Carranza es demasiado peligrosa para seguir en una cárcel de mujeres por lo que la trasladarán a una de hombres. La mujer, de 38 años, está condenada a cadena perpetua en Schwarzenau, a unos 120 kilómetros de Viena, por el asesinato de su esposo y su amante.
Según informó el diario británico Daily Mail, en el 2008 Carranza —que nació en México, pero tiene nacionalidad española— mató a tiros a su exmarido porque él se negaba a dejar su hogar, aún cuando ya se habían divorciado.
Después del homicidio, la convicta asesina descuartizó el cadáver, lo guardó en un congelador y finalmente lo enterró en el sótano de la heladería que tenía en Viena. Cuatro años después hizo lo mismo con su novio, porque supuestamente le había sido infiel.
Unos fontaneros que llegaron a hacer un trabajo a su heladería fueron quienes descubrieron los restos de los dos sujetos, alertando a las autoridades.
Desde el 2012 la temible criminal ha estado en una prisión que es exclusivamente para mujeres, donde adquirió fama de ser una reclusa muy peligrosa y fue diagnosticada con un “trastorno grave, completo y multifacético de la personalidad”.
La nueva cárcel adonde será trasladada es un centro con especialización siquiátrica que tiene 91 reclusos más, algunos de ellos condenados también a cumplir sentencia de cadena perpetua. Allí Carranza será vigilada por 8 agentes de seguridad, a la vez que será atendida por el personal médico, que incluye 45 enfermeros, 18 terapistas y 4 especialistas.
Fuente; contextotucuman.com