Con la marcha del domingo 22 y los reclamos por el escándalo de corrupción y complicidad del estado en el caso Odebrecht, el pueblo dominicano le envió un mensaje muy claro al presidente Danilo Medina, pero este no lo entendió porque se hace el ciego, sordo y mudo, para no escuchar las demandas y quejas de la gente que tenía cifradas las esperanzas en él.
Los ciudadanos le dieron un compás de espera al gobierno de Danilo Medina, pensando que este iba a ser diferente a los que hemos tenido en el pasado, al ver que ha venido con un estilo igual o peor y con un ribete dictatorial, los dominicanos están decepcionados.
Qué habría imposibilitado al presidente Medina para no cumplir el compromiso que hizo con este país tan bueno, paciente y solidario con él y el PLD, eso que prometió cuando era candidato en el 2012 y 2016 de corregir lo que está mal y hacer lo que nunca se había hecho, tendría que ser algo de causa mayor que está por encima de la República Dominicana, cosa con la que no estamos de acuerdo porque él se debe a nosotros que fuimos los que lo llevamos ahí.
Danilo Medina tiene una responsabilidad con los dominicanos que confiamos en él, y más con los que hicimos posible su reelección, que a juzgar por los hechos nos equivocamos, nos pasó como el cuento del “toro y el hombre vico”, que corriéndole al toro que no era, lo ensartó el toro que si era…
Lamento mucho ver al «amigo» Danilo Medina Sánchez en la situación por la que está pasando, por su terquedad y ambiciones se está quedando solo aún estando en el poder, a tal punto que ni los peledeistas salen a defenderlo, a menos que no sean los que están en el gobierno porque están cobrando. ¿Qué pasó con el ser humano «Dani»?, me lo han cambiado, ese no es el Danilo que conocí en el 2006-2007 en su oficina de la José Amado Soler esquina Lincoln, quien me pidió encarecidamente que le apoyara para ser presidente y que quería un joven de mis condiciones y mi capacidad al lado de él en su gobierno para hacer las transformaciones que el país necesitaba, que rápido se olvidó y cambió el líder sanjuanero, Danilo Medina Sánchez.
Por Salvador Holguín/ Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.