Los estadounidenses, en especial los que conviven con su pareja, tienen significativamente menos relaciones sexuales que hace 20 años, según un estudio publicado el martes.
De media, las parejas, casadas o no, hicieron el amor 16 veces menos en el período de 2010 a 2014 que entre 2000 y 2004, de acuerdo con este estudio hecho a partir de una encuesta a 26.000 estadounidenses sobre su comportamiento íntimo desde 1989.
Si se considera a los estadounidenses en general, la disminución es menos acentuada pero sigue siendo fuerte: tuvieron nueve relaciones sexuales menos por año en el período 2010-2014 que en el de 1995-1999.
«Estas estadísticas revelan un cambio importante en términos de matrimonio y relaciones sexuales con respecto a las décadas anteriores», señaló Jean Twenge, profesor de psicología de la Universidad del Estado de San Diego en California, principal autor del estudio.
«En los años 1990, las parejas casadas tenían relaciones sexuales más frecuentemente que las personas que nunca habían estado casadas; a mediados de la década de 2000 hay un cambio, los solteros eran más activos sexualmente», indicó.
Los investigadores no dieron ninguna explicación para este fenómeno, pero señalaron que la edad parecía determinante.
«Pese a su reputación de tener muchos contactos sociales, los ‘Millennials (que ingresaron en la edad adulta en la década de 2000) y la generación siguiente, bautizada como iGen o Z, en realidad tienen relaciones sexuales con menos frecuencia que sus padres y abuelos cuando eran jóvenes», según el profesor Twenge.
Esto se explica en parte porque estas nuevas generaciones tienen menos parejas estables.
Los veinteañeros tienen relaciones sexuales más de 80 veces al año en promedio. Ese número cae a 60 veces a los 45 años y a 20 veces a los 65 años.
Después del pico de actividad sexual alrededor de los 25 años, cada año la frecuencia de relaciones disminuye 3,2% por año.
Las parejas mayores, casadas o no, son menos activas sexualmente, sobre todo desde el año 2000, indica el estudio.
Una publicación anterior mostró que el sentimiento de felicidad experimentado entre los adultos en Estados Unidos disminuyó luego de los 30 años entre 2000 y 2014.
«Con menos relaciones sexuales y menos sentimiento de bienestar, no sorprende que los adultos estadounidenses parezcan profundamente insatisfechos hoy en día», sostuvo Twenge.