Las recientes declaraciones del Papa Francisco al semanario alemán Die Zeit han vuelto a crear expectativas en torno a suprimir el celibato sacerdotal o de relajarlo. “En la Iglesia se trata siempre de reconocer el momento oportuno cuando el Espíritu Santo pide algo”, dijo el Papa.
Considerando que en algunas partes del mundo hay escasez de sacerdotes -en especial las más remotas- es que esta posibilidad está cobrando más fuerza.
Esto no significa que vayan a dejar de lado el requisito del celibato a la hora de ordenar nuevos sacerdotes en la Iglesia Católica. Tiene más que ver con los viri probati, que son hombres que, a pesar de estar casados, tienen una intachable fe.
“Debemos ver si los viri probati son una posibilidad. A continuación debemos determinar qué tareas pueden llevar a cabo, por ejemplo, en comunidades remotas” , aseguró Bergoglio.
Los viri probati están siendo considerados hace ya décadas, pero ningún Papa había querido darle la importancia necesaria hasta la llegada de Francisco.
Esta opción puede ayudar a resolver la escasez en países como Brasil, donde ha disminuido la ordenanza. De seguir adelante con esta propuesta, sería de gran ayuda para la evangelización en el Amazonas, donde solamente hay un sacerdote por cada 10.000 católicos.
La entrevista de una revista alemana a Francisco.
Francisco descartó, en cambio, que las mujeres puedan ordenarse. Lo hizo en su primera rueda de prensa, en verano del 2013, mientras regresaba de Río de Janeiro. Pero no defendió la posición con excesiva vehemencia, sino que atribuyó a Juan Pablo II el haber cerrado esa puerta en la Iglesia, de modo definitivo.
Fuente: https://www.upsocl.com