En febrero pasado se dio a conocer el rescate de una niña de sólo 8 años que fue encontrada desnuda en el estado indio de Uttar Pradesh.
Según sospecharon las autoridades en aquella oportunidad, todo indicaba que la menor había vivido durante bastante tiempo en la compañía de un grupo de monos.
No entendía ningún lenguaje verbal, no comía con las manos e incluso caminaba con sus cuatro extremidades, de manera similar a cómo lo hacen diversos animales. Estas características hicieron pensar que se trataba de un caso de “niña salvaje”.
Dos meses han pasado desde su hallazgo, periodo en el que ha conseguido notables avances en el hospital en el que se encuentra internada.
Tal como recoge la edición online del periódico británico The Guardian, hoy en día ya puede caminar perfectamente erguida, y come alimentos sólidos propios de una dieta normal de un humano.
Precisamente estos detalles han hecho pensar a los médicos encargados que no se trataba de una niña criada por monos, como se pensó en un primer momento. En cambio, todo hace suponer que corresponde a una menor física y mentalmente discapacitada, que probablemente fue abandonada por su familia en el santuario natural de Katarniaghat.
Ankur Lal, jefe médico del distrito de Bahraich, comentó al citado medio que cuando la encontraron, presentaba un comportamiento violento.
“No tenía hábitos higiénicos, no se comunicaba. Así que se dio por sentado que llevaba mucho tiempo viviendo en la jungla”, precisó el especialista. El hecho de que ahora camine de forma normal hace presumir que no vivió en la jungla desde su nacimiento.
Por su parte, DK Singh, jefe médico del hospital en el que se realiza el tratamiento de la niña, enfatizó que en India es común que algunas personas prefieran no tener hijas.
“Y ella no está mentalmente sana, lo que invita a pensar que fue abandonada. Si es cierto que estaba viviendo con monos, habrá sido por unos pocos días, no un largo período de tiempo”, añadió.
Cabe señalar que la menor fue encontrada en las cercanías de una autopista, y no en la profundidad de la selva.
“Es muy poco probable que la niña pueda pasar años en ese bosque, y que ningún miembro de las brigadas forestales que patrullan el Katarniaghat, o las cámaras de seguridad, no notaran nada”, sostuvo JP Singh, jefe de las brigadas forestales del distrito.
El próximo sábado la niña será trasladada hacia un hogar de menores en Lucknow, capital del estado de Uttar Pradesh, para que continúe con su recuperación.
“La verdad del asunto es que su familia no quería tenerla”, sostuvo Ranjana Kumari, activista líder de un movimiento que promueve el bienestar de mujeres jóvenes.
“Algunas familias valoran menos a las niñas en relación a los niños. Prefieren deshacerse de ellas antes que gastar dineros en ellas. Es una responsabilidad mayor por el tipo de entorno social en el que vivimos”, añadió.