Hace seis años, el fotógrafo mexicano Diego Huerta se dedicó a explorar el sur de su país junto a su cámara. En medio de este viaje, llegó al pueblo Copainala en Chiapas y encontró a una particular niña que no pudo evitar fotografiar.
“Me encontré con los ojos mas brillantes que jamás haya visto en persona, la belleza de esta niña era similar a los paisajes que uno puede apreciar a donde quiera que voltee”, describió el fotógrafo sobre el encuentro.
La protagonista de la foto es Adriana, una niña sorda que debió comunicarse con señas con Huerta a la hora del retrato. En la imagen, la joven proveniente de la etnia Zoque u O’ deput (“Gente con palabra”) viste con una blusa blanca y una falda roja, y mira atentamente hacia el lente del artista.
Seis años después del primer encuentro entre la niña y Diego, ambos se reencontraron para tomar una nueva fotografía. Adriana usó el mismo vestuario de la fotografía original y posó con una apariencia mucho más madura. “Nunca fue el color, es lo que hay detrás, esa mirada. Nunca fue el color, siempre fue Adriana, la chica más bella de México”, expresó el fotógrafo, quien además se tomó una foto junto a ella.
Diego Huerta también compartió un video en su cuenta de Instagram, en el que se muestra cómo captura la nueva foto de la joven.
En tanto, este fotógrafo se dedica a recorrer su país en busca de rescatar la belleza en las distintas etnias y culturas de los pueblos nativos. En su sitio web, Diego publica las historias que logra capturar con su lente.