La esperanza permaneció hasta el final. Pero la madrugada de este miércoles, todo terminó al hallarse el cuerpo de Juan Pablo Irigoyen Ramírez, de 19 años de edad, la única persona que faltaba por localizar en el edificio que se derrumbó en las calles Gabriel Mancera y Escocia en la colonia del Valle, Ciudad de México.
El joven se encontraba con su madre cuando comenzó el terremoto. Mientras ella logró salir del edificio, Juan Pablo regresó por su perrita y quedó atrapado entre los escombros, relataron sus amigos, quienes confiaban en hallarlo con vida, pues tras el derrumbe Juan Pablo se comunicó a través de su celular. De pronto, se perdió la comunicación.
“Falta Juan Pablo”, “Fuerza Juan Pablo”, “Rescaten a Juan Pablo”, se leía en cartulinas colocadas en postes y paredes. La familia y los amigos esperaban que salga con vida. Fue imposible.
Fuente: Peru21.pe