El psiquiatra y psicoterapeuta José Miguel Gómez afirmó anoche que le preocupa mucho como son tratados los temas de violencia en los medios de comunicación del país, y pidió que los mismos sean manejados con mucha delicadeza.
Informó que en otros países como Uruguay, Argentina y Costa Rica cuando se dan hechos tan violentos la información es dada, pero no se publica a una persona ahorcada, con un charco de sangre, con un disparo o a una persona en la escena de la violencia.
¨Esos países no lo hacen porque todos los trabajadores de la conducta sabemos que cuando cientos de personas, vulnerables en términos de su salud mental, ven o escuchan las problemáticas de violencia que están viviendo otras personas, hay adolescentes y adultos que pueden ser influenciados a esta violencia, buscar la alternativa en el suicidio que vieron en otros o buscar los métodos que otras personas eligieron¨, precisó.
Entrevistado en el programa Toque Final con Julio Martínez Pozo, que se transmite por Antena 7, el psiquiatra consideró que es por eso que en el periodismo responsable se da la información veraz, pero no se exponen los hechos de manera tan dramática para cuidar así la salud mental de gente vulnerable.
Dijo que los acontecimientos recientes de violencia reflejan los niveles de trastornos de enfermedades mentales y conductuales que padecen muchas personas en familias que no tienen el acceso a salud mental.
¨A mí como trabajador de la salud mental me está preocupando la violencia de género, la violencia intrafamiliar y la violencia social que se está viviendo en la Republica Dominicana¨, expresó.
Indicó que dentro de las comunidades, familias o parejas no tienen identificado cuando un miembro está siendo afectado por un trastorno o conducta emocional o por un problema psicoemocional que afecta su salud mental y que pone en riesgo su vida y la de su familia.
En ese sentido, llamó a las instituciones, iglesias, escuelas y comunidades a hablar de la problemática de salud mental, y pidió que las políticas públicas en salud mental puedan llegar a las comunidades donde las personas están teniendo un problema de tipo legal, familiar, de pareja o una problemática social con un vecino.
¨Que en el país las personas se eduquen, trabajen en consenso, busquen la ayuda del psicólogo, del psiquiatra, del pastor o del sacerdote antes que terminar haciéndose daño o dañando a una persona¨, expresó.
Dijo que los recientes hechos son preocupantes, tras destacar que el país ya está en el quinto lugar de los países de Latinoamérica como uno de los mayores violentos, y en el tercer lugar en violencia de género con violencia machista.
Asimismo, señaló que en lo que va de año 68 mujeres han sido víctimas de violencia de género y de violencia machista, y en estos casos hay muchos niños afectados, así como muchas comunidades impactadas por violencia descontrolada, por violencia que ha afectado a la comunidad y que ha puesto de rodillas a la sociedad dominicana.
Sostuvo que su llamado como psiquiatra es que las personas se aboquen a buscar la ayuda antes de que más hechos catastróficos pasen en la República Dominicana.
Sobre los indicadores psicosociales el psicoterapeuta explicó que hay factores de tipos individuales y factores sociales. De los individuales señaló personas con mal manejo de la ira, con trastornos del control de los impulsos, abuso de drogas, alcoholismo, trastornos mentales, esquizofrenia, bipolaridad, problemas de tipo marital, problemas familiares, defunción a nivel familiar, problemas de pobreza, de marginalidad, de desempleo, de estrés, de hacinamiento de exclusión social, es decir, familias muy afectadas en términos de pobre acceso al desarrollo social.
Por otro lado, dijo que están las problemáticas psicosociales, una sociedad más estresada, con pobre calidad de vida, que no tiene acceso al desarrollo social, a la inclusión social y por tanto, eso trae resentimiento social, desesperanza aprehendida, desmoralización sin esperanza, frustración y niveles de indefensión emocional. ¨Es decir, donde hay mucha gente atrapada que siente que sus problemas no van a cambiar y han perdido la capacidad y la habilidad social para armar un proyecto de vida con felicidad, prosperidad y con bienestar¨.