Lo fácil no siempre ha sido lo mejor cuando empuja al abismo a quienes pretenden alzarse con lo ajeno para provecho propio sin importar las consecuencias.
Es el caso de algunos de los 74 dominicanos repatriados recientemente de Estados Unidos donde cumplieron condenas por crímenes, robos, asaltos, falsificación de documentos, fraudes estatales, secuestros, violaciones sexuales y 34 por tráfico de drogas. Con éstos suman mil 561 los regresados por distintos delitos. Mientras que 8 mil siguen tras las rejas en EE.UU., no por estar orando.
Quiérase o no, se trata de una vergüenza para sus familiares y para la República Dominicana.
Es bueno recordar lo que refiere Génesis 3:19-21 en la Santa Biblia que dice: “Te ganarás el pan con el sudor de tu frente”.
Resulta que no pocos prefieren lo fácil, que le den y hurtar, denigrando su autoestima. ¡Qué pena!
Quienes prefieren lo fácil no imitan a los buenos dominicanos que se esfuerzan trabajando para lograr sus propósitos, así como otros tantos con pequeños puestos de ventas que les permiten ganar el pan de cada día.
Los que cometen hechos delictivos, lo importante es que se reivindiquen por su propio bien. Si tienen familia, demuestren su interés por el camino correcto. Nadie es perfecto, pero siempre hay mil y una formas de hacer lo mejor.
Dale valor a tu presente con lo mejor que puedas hacer en tu provecho, sin olvidar que no siempre lo fácil es lo mejor. Lo que importa es tu reivindicación.
Por Cándida Figuereo Figueroa