Cuba acogió a 3,8 millones de turistas en lo que va del año a pesar de las afectaciones causadas por el huracán Irma, y mantiene la meta inédita de llegar a 4,7 millones de visitantes al cierre de 2017, se informó oficialmente.

«Hasta el pasado 21 de octubre, llegaron a Cuba más de 3 millones 800.000 visitantes foráneos y esa cifra permite aspirar a cumplir con los 4 millones 700.000 previstos para 2017», aseguró el ministro de Turismo, Manuel Marrero, según publica este jueves el portal Cubadebate.




El potente huracán Irma castigó durante cuatro días el litoral norte cubano a mediados de septiembre, donde se asientan los principales polos turísticos de la isla, con cuantiosos daños en la planta hotelera.

En ese momento había en Cuba más de 54.000 turistas, ninguno de los cuales fue afectado físicamente, informó.



A pesar de los daños, Marrero aseguró que su cartera está lista para comenzar la temporada alta el 1 de noviembre, «porque el país cuenta con todos los recursos para garantizar cada uno de los estándares necesarios».

Para esa temporada alta, Cuba cuenta con 366 hoteles que suman 68.000 habitaciones, el 69,4% de ellas de cuatro o cinco estrellas.

«Dentro de esa gran cantidad de hoteles, tenemos más de la mitad operados mediante 88 contratos con 20 cadenas internacionales, una medida enfocada siempre a preservar nuestra propiedad sobre las instalaciones y aprovechar la experiencia de nuestros socios extranjeros», dijo.

Las cadenas españolas Meliá e Iberoestar, que gestionan mas de la mitad de la planta hotelera cubana, emitieron comunicados para asegurar que sus instalaciones está listas.

Marreo señaló que en la cartera de negocios que Cuba presentará la próxima semana en la Feria Internacional de La Habana hay 140 proyectos turísticos para la inversión extranjera.

Entre esas oportunidades figuran la construcción de campos de golf e infraestructuras inmobiliarias asociadas.

«El Punta Colorada (occidente) tenemos uno de los proyectos más grandes de América, con una duración total de dos décadas, la construcción de una terminal de cruceros, cinco hoteles con más de 1.000 habitaciones en total y otras 20.000 unidades inmobiliarias», indicó.

Pero «la idea está pensada para que nos reporte paulatinos beneficios desde los primeros años», añadió.

Marreo indicó que el turismo cubano se desarrolla sobre la base de cuidado y preservación del medio ambiente.

«También dedicamos el 5% de todas nuestras inversiones al tema ambiental y utilizamos las tres cuartas partes de todos los desechos hoteleros en la alimentación animal», dijo.