Temperaturas congelantes y vientos gélidos azotaron ayer gran parte del norte de Estados Unidos, e incluso impusieron récord en una ciudad de Minnesota que está tan fría que se le conoce como la Hielera de la Nación.
Se pronostica que las bajas temperaturas continuarán durante los próximos días. Los meteorólogos advirtieron sobre riesgos de hipotermia y congelamiento a causa del viento ártico que corre sobre la región central de Estados Unidos con trayectoria hacia el este.
El Servicio Meteorológico Nacional reportó que en las localidades de International Falls y Hibbing, Minnesota, se alcanzaron la mañana del miércoles temperaturas bajo cero nunca antes registradas.
International Falls, autoproclamada la Hielera de la Nación, alcanzó los 38 grados Celsius bajo cero (-37° Fahrenheit), con lo que quebró el récord de 1924 de -35,5° Celsius (-32° Fahrenheit). En Hibbing la temperatura mínima fue de 33° Celsius bajo cero (-28 Fahrenheit), un grado por debajo de la marca previa de 1964.
Se emitieron avisos de vientos helados para gran parte de Nueva Inglaterra, el norte de Pensilvania y Nueva York.
Indica el Listin Diario que las temperaturas máximas para esos sitios y las regiones al norte de las Planicies y los Grandes Lagos se calculan en alrededor de 12 grados Celsius bajo cero (10° Fahrenheit) y mínimas de -17° Celsius (0° Fahrenheit) para el resto de la semana.
El Servicio Meteorológico Nacional dijo que la sensación térmica el jueves en varias zonas podría estar por debajo de los -17 Celsius a causa del factor de congelación.
En tanto, la ciudad de Erie se recupera de una tormenta que arrojó 86 centímetros (34 pulgadas) de nieve el día de Navidad, que hizo añicos el récord previo en la ciudad de 20 centímetros (ocho pulgadas), y otros 60 centímetros (24,5 pulgadas) la noche del martes.
Desde el 24 de diciembre han caído más de 165 centímetros (65 pulgadas) de nieve en la ciudad y se pronostica que el miércoles caerán entre 5 y 10 centímetros (entre 2 y 4 pulgadas) más, mientras la población palea nieve bajo temperaturas gélidas.
Fuertes vientos que soplaban desde el oeste sobre el Lago Erie recogieron la humedad, se convirtieron en nieve y chocaron con ráfagas en sentido contrario, dejando un sendero de nieve a lo largo de su ribera, desde Ohio hasta Nueva York, dijo Zach Sefcovic, del Servicio Meteorológico Nacional en Cleveland.