El jardinero dominicano de los Navegantes del Magallanes, Jesús «Cacao» Valdez, se convirtió este domingo en el jugador más valioso de la temporada 2017-2018 del béisbol profesional venezolano.
Valdez, de 33 años, obtuvo 47 de los 50 votos posibles en la medición que hace la empresa Numeritos Gerencia Deportiva en Asociación con el LineUp Internacional.
«Este uno de los principales logros de mi carrera. Todo el mundo sabe lo complicada que es esta liga y me siento orgulloso de lo que he podido hacer este año en Venezuela», declaró el dominicano a la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP).
El segundo lugar fue para el cubano Henry Urrutia, jardinero de los Cardenales de Lara, con 17 votos, y el tercero fue el estadounidense José Vargas, jardinero de los Tigres de Aragua, con 14 votos.
Valdez ya había sido premiado como productor del año por sus sólidos números: bateó para .339 con 79 imparables, 18 jonrones, 61 carreras impulsadas y 52 anotadas en 62 compromisos.
Fue el líder de la LVBP en cuadrangulares, remolcadas y anotadas.
El lanzador del año en la temporada fue Guillermo Moscoso, de los Tigres de Aragua, tras recibir 26 de los 50 votos posibles.
Moscoso, de 34 años, fue segundo en promedio de carreras limpias, con 2.05, y tercero en WHIP (boletos y hits por inning lanzado), con 1.14, según la LVBP.
También dejó récord de 5-2 y fue uno de los tres lanzadores en la campaña que cubrió al menos 70 episodios (70.1).
El novato del año fue el jardinero Alexander Palma, de los Leones del Caracas, quien logró 40 de los 50 votos posibles.
Palma, de 22 años, bateó para un promedio de .300, remolcó 22 carreras y anotó 30. de acuerdo con la LVBP.
El entrenador del año, por su parte, fue Mike Rojas, también del Caracas, quien recibió 22 de los 50 votos.
El experimentado lanzador derecho, Freddy García, jugador de los Tigres de Aragua, se llevó el premio al regreso del año, con 16 de los 50 votos.
García lanzó 11 veces, ocho como abridor, durante la eliminatoria y dejó balance de 4-0, con 2.33 de efectividad y 0.99 de WHIP. Según la LVBP, en 46.1 innings toleró 43 hits y 12 carreras limpias, mientras que regaló apenas tres boletos y logró 33 ponches.
El pítcher, de 41 años de edad, lanzó en las Grandes Ligas hasta 2013 y no jugaba desde que lo hizo con Monterrey, en la Liga Mexicana de Béisbol, en 2016.
