SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Recordar a Mamá Tingó, activista y defensora de los derechos de los campesinos, considerada una de las víctimas de los 12 años de Joaquín Balaguer, es un orgullo para el pueblo dominicano.
Se trata de una campesina, casi analfabeta, que vivía en una de las comunidades más empobrecidas y olvidadas de República Dominicana, Hato Viejo, Yamasá, pero que logró dejar un legado. Símbolo de la lucha por la tierra y un ejemplo de la mujer rural en la defensa de los derechos de los campesinos en República Dominicana y toda América Latina y el Caribe.