Técnicos del Ministerio de Salud y Medio Ambiente tomaron muestras de la sustancia blanca con aspecto cristalino que fue esparcida a cielo abierto en las comunidades San Isidro y Guerra, para ser analizadas en laboratorios. Según los vecinos de estos sectores, la sustancia está provocando nauseas, irritación en la piel y problemas respiratorios, entre otros efectos dañinos a la salud.
El viceministro de Salud Colectiva, Héctor Quezada, informó que al lugar acudió un equipo del área de salud correspondiente a esa zona, a cargo del doctor Alcibíades Hernández, para determinar con exactitud de qué se trata y sus efectos.
No obstante, Quezada llamó a la población residente en las comunidades afectadas a no automedicarse y acudir al médico ante los síntomas que dicen presentar, para que sean evaluados y tratados por un personal de salud capacitado.
Indica el Listín Diario que el Ministerio de Medio Ambiente dijo que ante la denuncia, tomaron muestras y fueron enviadas al laboratorio de la Dirección General de Aduanas para determinar de qué se trata.
El material que fue depositado en San Isidro, que según la información de algunos sacos es metabisulfito de sodio, fue eliminado con equipos pesados, sin embargo el de la sección El Viso de Guerra, aún permanece en el lugar.
El señor Freddy Florencio dijo que lo que más le preocupa es que por la comunidad El Viso pasan importantes fuentes subterráneas del río Brujuelas Casuí, que suple el acueducto que lleva su mismo nombre.
Mostró cómo se murió la vegetación en el entorno del polvo cristalino o metabisulfito de sodio, el cual con las lluvias, libera un líquido de color oscuro, el cual a medida en que recorre el contén de la carretera de tierra, va matando la vegetación que allí había crecido.
Aseguró que los males que sufren los habitantes de Guerra, que antes no ocurrían, son ocasionados por el químico que desconocidos arrojaron en sus comunidades.
“En el hospital de aquí han aumentado las demandas por casos de diarrea, vómitos, picazón en la piel y males respiratorios”, agregó Florencio.
En las dos visitas que han realizado equipos de LISTÍN DIARIO, los reporteros gráficos, Víctor Ramírez y Arturo Pérez, tuvieron ataque de tos, picazón en los ojos, la cara, la nariz, los brazos, cuando se acercaron a hacer las fotografías.
En una publicación de ayer, este medio expone la preocupación de residentes en las comunidades San Isidro y Guerra, Santo Domingo Este, que aseguran que un polvo blanco de textura cristalina y picante fue depositado en la zona causándoles efectos en la salud en diciembre pasado.
Dicen que cuando pasan cerca les pica todo el cuerpo, sienten náuseas, les falta la respiración, sienten mareos, les arden los ojos, se les irrita la garganta, entre otros malestares.