Quién no ha temido alguna vez comprar un vuelo en Internet al aeropuerto equivocado. Los errores pasan como prueba la historia reciente de esas dos mujeres estadounidenses que debían volar a San José de California y acabaron en San José… de Costa Rica.
Lo que casi nadie se espera es que con los billetes correctos uno coja su avión y acabe el día en la Laponia cenando carne de arce.
Esto es exactamente lo que ha ocurrido esta misma semana a 34 pasajeros de Nextjet, la aerolínea regional sueca. Imaginen la sorpresa cuando después de una hora de vuelo, en lugar de llegar a Gotemburgo, aterrizaron en Luleå, en plena Laponia, un lugar donde la temperatura en invierno puede alcanzar los -40 grados centígrados.
“Simplemente me empecé a reír. ¿Qué vas a hacer?”, relató al diario Aftonbladet Roger Leirvik, uno de los viajeros, cuando se vio a 1.000 kilómetros de distancia de su casa.
¿La explicación? Un sonrojante malentendido por parte de la compañía. Nextjet señaló que se había visto obligada a cancelar su vuelo de Sundsvall a Gotemburgo debido al mal tiempo.
El problema es que esa información nunca llegó a los pasajeros… ni al aeropuerto de Sundsvall en el que esperaban su avión indicó SIN.
Lo único de lo que fueron advertidos fue de un retraso de tres horas en su vuelo, así en lugar de embarcar a las 5 de la tarde o hicieron a las 8 sin saber que esa aeronave se dirigía a la tierra de los samis y las auroras boreales.
Allí pasaron la noche, en un hotel de Luleå que les facilitó la compañía. Nextjet ha pedido disculpas por el incidente y al final todo ha quedado en una anécdota. Al día siguiente todos volaron felizmente a Gotemburgo.