Luego de que se conocieran detalles de la muerte de Avicii, ocurrida el viernes 20 de abril en Mascate, la capital de Omán, se empezó a especular con quién iba a heredar el abultado patrimonio que el DJ y productor sueco supo acumular en sus 28 años de vida.
No hay cifras exactas de su patrimonio en el momento de su muerte, pero se calcula que la fortuna que dejó el creador de los hits Levels y Wake Me Up rondaría la friolera cifra de 70 millones de euros.
En 2012, el año en que su figura tomó fama mundial, según la reconocida revista Forbes Avicci cosechó 5,7 millones de euros, cifra que fue aumentando año tras año. En 2013 facturó 16 millones y en 2014, cuando se convirtió en el tercer DJ mejor pagado del mundo, alcanzó la cifra de 23 millones de euros.
En esa época, el joven talento ya era reconocido en todo el planeta, sus temas eran los más escuchados y sus shows convocaban a miles de personas en todo el planeta. Se había convertido en una creciente celebridad que no paraba de crecer, aunque por dentro el camino era oscuro y descontrolado.
En ?2015 cobraba 250 mil dólares por presentación y en 2016, a causa de sus problemas de salud originados por el consumo desmedido de alcohol, anunció su retiro, pero los billetes no dejaron de entrar: facturó 12 millones de euros sin haber tocado una vez.
A todo esto hay que sumarle sus valiosas propiedades. Donde pasaba más tiempos era en su mansión en California, Estados Unidos, y está valorada en 12,6 millones de euros. La propiedad de 650 metros cuadrados esta situada en una elitista urbanización de Hollywood Hills y tiene como vecinos nada menos que a Jennifer Aniston, Keanu Reeves y el matrimonio de Michael Bublé y Luisana Lopilato.
¿Quién va a heredar toda esta fortuna? El sueco fue pareja de la cantante Emily Goldberg, la modelo canadiense Raquel Bettencourt y la modelo checa Tereza Kacerová, pero con ninguna contrajo matrimonio, por lo que ellas no serán las beneficiarias.
Tim Bergling (el nombre real de Avicii) tampoco tuvo hijos, por lo tanto, los herederos de su fortuna serían sus padres, Klas Bergling y Anki Liden, una actriz de éxito que apareció en más de 50 películas y programas de televisión en su país.
Indica Clarin que el productor y DJ mantenía una buena relación tanto con ellos como sus tres hermanos Anton, Linda y David. De hecho, en las entrevistas siempre recalcaba que el poco tiempo libre que tenía le gustaba pasarlo rodeado de todos ellos.